E E. U U. retrocede y analiza invitar aun funcionario cuba no ala Cumbre de las Américas
Lo anticiparon fuentes de la Casa Blanca. Es un intento para salvar la conferencia frente al rechazo de algunos países que reclaman que se incluya a la isla, a Nicaragua y a Venezuela.
El presidente norteamericano Joe Biden analiza invitar a un representante cubano a la Cumbre de las Américas, dijo este viernes un funcionario estadounidense. Se trata de un gesto para evitar que fracase esta reunión continental, que corre el riesgo de colapsar por desacuerdos sobre la lista de invitados.
La invitación para la cumbre de Los Angeles, el 8 y 9 de junio, sería cursada a algún funcionario del ministerio de Relaciones Exteriores cubano. Pero sería para que se uniera como observador, no como participante completo. No sería invitado ni el presidente Miguel Díaz Canel ni el canciller Bruno Rodríguez.
No está claro si Cuba aceptaría la invitación, dijo el funcionario estadounidense que se negó a ser identificado, a la agencia AP.
Poco antes de que saliera publicada la novedad, el senador republicano Marco Rubio, un fuerte opositor al régimen cubano, se había anticipado con un tweet: “Biden va a invitar al régimen en #Cuba a la Cumbre de las Américas”, escribió, sin dar mayor explicación sobre el tema.
La Cumbre de las Américas se realizará en Estados Unidos por primera vez desde 1994. Pero la reunión amenaza con convertirse en un verdadero fracaso para el gobierno de Biden porque hay varios presidentes que no quieren presentarse si no están invitados a la mesa Cuba, Venezuela y Nicaragua.
Si bien las invitaciones no han sido formalmente cursadas, el Departamento de Estado había dejado trascender que los líderes de esos regímenes no serían convocados porque violan los principios democráticos y los derechos humanos.
Varios países americanos ya anticiparon que no irán a la cita si no comparecen todos. El líder de esta movida es el mexicano Andrés Manuel López Obrador, que dijo que no iría en persona si no van todos y que solo enviaría un representante.
Bolivia, Guatemala siguieron sus pasos, también varios países del Caribe. Nicaragua dijo no estar interesado. El brasileño Jair Bolsonaro amenaza con no ir por estar enfocado en su campaña presidencial.
El presidente Alberto Fernández, que además es el líder protémpore de la CELAC, aboga por que nadie quede excluido de la cita. Pero si bien en un comienzo dijo que iría a Los Angeles, la portavoz de La Rosada, Gabriela Cerutti, dijo este viernes que Fernández aún está evaluando si viaja o no.
Ante la posibilidad de un fracaso estrepitoso, Estados Unidos lanzó una ofensiva diplomática. El enviado especial de Biden, Christopher Dodd, se reunió con López Obrador varias horas para intentar convencerlo de que vaya a la Cumbre, pero aparentemente no hubo avances.
Jake Sullivan, asesor de seguridad nacional de Biden, dijo a los periodistas a bordo del Air Force One el viernes que la administración está teniendo “conversaciones sinceras y constructivas”, pero se negó a decir más.
En este contexto se inscribe esta posible invitación a un representante cubano y también incluiría la flexibilización de envío de remesas a la isla aprobada días atrás. Podría ser una salida que destrabe esta crisis, cuando faltan apenas 20 días para la Cumbre. Pero quizás sea un gesto demasiado pequeño para los países rebeldes.
Biden debe moverse en un delicado equilibrio. Si bien debe evitar el fracaso de la cumbre, cualquier señal que avale a los regímenes de Cuba o Venezuela puede ser duramente criticada entre los inmigrantes de esas comunidades de Florida, donde este noviembre se librará una dura batalla electoral. Las elecciones de medio término en las cuales el oficialismo demócrata puede perder su leve mayoría en ambas cámaras.
Entre tanto, el embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, dijo este viernes que ahora “espera” la asistencia del gobierno mexicano a la Cumbre. “La esperanza de nosotros es que sí vaya México, y sí va a ir México porque va el secretario, el canciller (Marcelo) Ebrard, y el equipo. Ellos van a ir. En la manera en que se trabaje con el presidente López Obrador con mucho respeto, ojalá que sí vaya, pero eso es algo que están discutiendo”, dijo. El mandatario había señalado ayer que esperaba señales de Estados Unidos.w