La artillería pesada enviada por EE.UU. llega finalmente a los ucranianos
Pokrovsk, Ucrania.- Camuflada en un montón de ramas cortadas de árboles cercanos, el arma que Ucrania espera que marque una diferencia crítica en su guerra con Rusia es casi invisible a más de unos pocos metros de distancia. Pronto, una sola ronda sale disparada con una explosión y un aullido metálico mientras navega hacia las posiciones rusas. Es el obús M777 de fabricación estadounidense. Dispara más lejos, se mueve más rápido y se oculta más fácilmente. Y eso es lo que el ejército ucraniano ha estado esperando.
Tres meses después de la guerra en Ucrania, los primeros M777, las armas más letales que Occidente ha proporcionado hasta ahora, están desplegadas en combate en el este de Ucrania. Su llegada ha impulsado las esperanzas de Ucrania de lograr la superioridad de la artillería al menos en algunas áreas de primera línea, un paso clave hacia las victorias militares en una guerra que ahora se libra principalmente en estepas planas y abiertas a larga distancia.
Los obuses estadounidenses son máquinas macizas de acero y titanio envueltas en mangueras hidráulicas y colocadas sobre cuatro soportes que se pliegan hacia arriba y hacia abajo. Ya han disparado cientos de rondas desde que llegaron alrededor del 8 de mayo, destruyendo vehículos blindados y matando a soldados rusos, dicen los comandantes ucranianos. “Esta arma nos acerca a la victoria”, dijo el coronel Roman Kachur, comandante de la 55.ª Brigada de Artillería, cuya unidad fue la primera en desplegar el arma. Mezclando confianza con un pedido implícito de más armamento: “Con cada arma moderna y más precisa nos acercamos a la victoria”.
No está claro cuán cerca está ese triunfo, estiman los analistas militares occidentales. La llegada de las nuevas armas no es garantía de éxito, ya que los rusos siguen enzarzados en feroces combates en la región oriental de Donbas. Mucho depende de los números.
“La artillería es en gran medida el negocio de la cantidad”, sostuvo Michael Kofman, director de estudios rusos en C.N.A., un instituto de investigación en Arlington, Virginia.
“Los rusos son uno de los ejércitos de artillería más grandes que puedes enfrentar”, advirtió.
Estados Unidos dijo hace semanas que proporcionaría los obuses, pero hasta ahora su uso en combate se ha insinuado principalmente en videos publicados online, en su mayoría de forma anónima, por soldados.
El domingo, el ejército proporcionó a periodistas de The New York Times un recorrido por una línea de armas en el este de Ucrania, la primera confirmación independiente de medios internacionales de que las armas están en uso.
Los analistas militares dicen que el efecto completo no se sentirá hasta dentro de al menos otras dos semanas, porque Ucrania todavía tiene que entrenar a suficientes soldados para disparar los 90 obuses prometidos por Estados Unidos y otros aliados. Solo alrededor de una docena de armas están ahora en el frente.