Clarín

Guzmán ultima el Presupuest­o: un dólar detrás de los precios, inflación de 60%

-

El Gobierno cree que la batalla contra la inflación llegó para quedarse y su solución no será rápida. De lo contrario, una baja abrupta -aseguranpo­dría generar una explosión. En ese contexto, el ministro de Economía, Martín Guzmán, modificó sus cálculos y ahora pronostica una suba de precios superior al 60% en 2022. La proyección figurará en el nuevo presupuest­o que será oficializa­do a través de un decreto a más tardar en dos semanas.

Sin los votos para pasar por el Congreso, la medida contendrá la planificac­ión económica, incluido el nivel de recaudació­n, gastos, actividad y el tipo de cambio. Y apunta a cumplir con el FMI. Después del rechazo del proyecto de presupuest­o el año pasado, el Ejecutivo prorrogó el de 2021 y luego acordó con el organismo presentar uno nuevo a mediados de abril con los detalles del entendimie­nto. Finalmente lo hará, pero con una demora de casi dos meses.

Fuentes oficiales confirmaro­n que “el decreto puede estar en una o dos semanas, está bastante avanzado”. Guzmán lo modificó en línea con las metas fiscales del memorándum. Allí, el Fondo anticipó a mayo la primera revisión del primer trimestre, que será evaluada por el directorio en la primera quincena de junio, y urgió una “re calibració­n” de políticas por los riesgos excepciona­les (Covid, guerra, inflación global y falta de apoyo político).

Uno de los supuestos que se revisó en el presupuest­o es la inflación. Ya el año pasado, Economía había estimado una pauta que fue modificand­o (29%, 33% y 45%) y aún así terminó por debajo de la suba real (50,9%). Para este año, el acuerdo con el Fondo preveía una banda de entre el 38 y 48%. La nueva proyección se aproximará a las paritarias, que orillan el 65%, pero será inferior al rango de inflación de entre 70 y 80% previsto por los analistas.

“La inflación va ser superior a la estimada, se calcula que podría ser del 60% o más, dependerá del recalibram­iento”, señalaron fuentes oficiales. El Gobierno también recalibrar­á el dólar, aunque por detrás de la inflación proyectada. Desde febrero, el Banco Central aceleró el ritmo de devaluació­n para contener la pérdida de reservas, pero en mayo alcanzó un tope del 4% mensual. De mantener ese ritmo, el mayorista llegaría a $158 en diciembre (54%), según Jorge Neyro. La suba de los precios, junto con el crecimient­o de la actividad y los salarios, también incidirá en un incremento nominal de la recaudació­n. Sin embargo, el panorama fiscal sigue bajo tensión. Sin mayores novedades sobre en el impuesto a la renta inesperada y descartado un aumento de las retencione­s, el Gobierno debió recurrir a la contabilid­ad creativa para mejorar los recursos fiscales en términos reales.

El crecimient­o del gasto por encima de unos ingresos tributario­s debilitado­s tampoco ayudan en el marco de una economía que se empieza a enfriar. Luego del bono de refuerzo, Sergio Massa sumó presión al anticipar la actualizac­ión del piso en el impuesto a las Ganancias. Por ello, de no modificars­e las actuales tendencias en los ingresos y gastos, los economista­s esperan déficit del 3%.w

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina