Ucrania admite que cada día pierde 100 soldados en las batallas del Este
Lo dijo el ministro de Defensa, y agregó que otros 500 resultan heridos. Reclaman armas de largo alcance.
Ucrania está perdiendo diariamente hasta 100 soldados en la guerra contra Rusia y registra hasta 500 militares heridos, según admitió este jueves el ministro de Defensa del país, Oleksiy Reznikov, en momentos en que recrudecen los combates en las ciudades del este.
“La situación en la línea de frente es difícil. Cada día tenemos hasta 100 soldados muertos y los heridos pueden llegar a 500”, dijo el ministro, explicando que del lado ruso también hay “importantes pérdidas” ya que sus tropas se encuentran con una “fuerte resistencia” ucraniana.
Reznikov resaltó el poder militar que tiene Rusia, aunque advirtió que sus tropas seguirán danto batalla a los invasores. “El monstruo ruso tiene muchos medios aún para devorar vidas humanas y satisfacer su ego imperial. Hemos demostrado que no le tenemos miedo al Kremlin, a diferencia de muchos otros. Pero nosotros, como país, no podemos permitirnos desangrarnos, perdiendo a nuestros hijos e hijas”, sostuvo.
El ministro volvió a reclamar armas a Occidente para poder enfrentar el avance de los rusos, y señaló que el gobierno ucraniano “no está satisfecho” con el ritmo y el volumen de las provisiones.
En la misma línea, el presidente Volodimir Zelenski dijo que Ucrania necesita armas de “largo alcance” que le permitan retomar rápidamente el control de Severodonetsk, ciudad clave donde se juega “el destino” de toda la región oriental del Donbás, una prioridad para Moscú.
Los soldados ucranianos luchan una de las batallas “más difíciles” de la guerra en Severodonetsk, gran parte de la cual está en manos de las fuerzas rusas, indicó Zelenski. “Defendemos nuestras posiciones, infligimos pérdidas importantes al enemigo.
“Defendemos nuestras posiciones, inflingimos pérdidas importantes al enemigo”.
Es una batalla muy dura, muy difícil, probablemente una de las más difíciles de esta guerra”, afirmó el mandatario. “En muchos sentidos, el destino del Donbás se decide allí”, agregó.
Severodonetsk y la vecina Lysychansk, separadas por un río, se han convertido en el centro del ataque de Moscú que, de conquistarlas, dispondría de gran ventaja para hacerse con toda la cuenca minera del Donbás, controlada parcialmente desde 2014 por separatistas prorrusos.
Kiev podría sin embargo retomar el control de Severodonetsk “en dos o tres días” si dispone de artillería de “largo alcance”, aseguró por su parte Serguéi Gaidai, gobernador de Lugansk, una de las regiones de Donbás.
Los ucranianos han pedido repetidamente a Occidente más sistemas de cohetes de largo alcance. Estados Unidos ya anunció el envío de cuatro dispositivos Himars, un sistema de lanzacohetes múltiples montados en blindados ligeros, con un alcance de unos 80 km.
Las tropas rusas controlan la mayoría de la ciudad de Severodonetsk, donde recurren a la táctica de tierra quemada con artillería, morteros y lanzaderas múltiples de misiles para acabar con la resistencia ucraniana, mientras libran en paralelo la batalla por Sloviansk, siguiente objetivo de Rusia.
“Los ocupantes efectuaron hoy (jueves) operaciones de asalto en la ciudad, no tuvieron éxito. Las hostilidades continúan”, recalcó el Estado Mayor General de Ucrania. La situación en Severodonetsk, junto a la vecina Lisichansk, el último bastión grande bajo control ucraniano en la región de Lugansk, es cambiante y poco clara.
Si en a víspera el gobernador de la provincia, Serhiy Gaidai, afirmó que las tropas de Kiev “solo controlan los suburbios de la ciudad”, posteriormente indicó que también “es nuestra la zona industrial” y que las “batallas callejeras” continúan en este centro regional.
Lo que han admitido las autoridades locales es que las tropas rusas controlan la mayor parte de la urbe donde, según el alcalde, Oleksandr Stryuk, ha quedado arrasado un tercio de los barrios y donde aún quedan unos 10.000 habitantes en una situación humanitaria “casi crítica” y sin posibilidades de ser evacuados.
“El silencio en Severodonetsk solo dura lo que tardan en recargar las armas”, señaló Gaidai, quien denunció que los rusos “recurren a tácticas primitivas: fuego de artillería pesada para luego intentar abrirse paso”, lo que se conoce como práctica de tierra quemada.
El Estado Mayor General de Ucrania confirmó que Rusia dispara contra las tropas “con morteros, artillería y misiles a través de lanzaderas múltiples”.■