Biden escuchó reproches para que no fracasara la cumbre
Los presidentes tenían muchos reproches que hacerle evidentemente a su par estadounidense Joe Biden que, en tren de que no fracasara la cumbre, escuchó como pocas veces ocurre, los reproches de la región en su propia casa. Pero Biden está también como todos los mandatarios enfocado en sus urgencias.
En el plano interno, la inflación, las desigualdades en su país, la violencia inusitadas por la tenencia libre de armas, las próximas legislativas donde los demócratas pueden perder en manos de los republicanos tanto la Cámara de Representantes como el Senado.
En el plano externo la guerra con Ucrania, que Alberto Fernández ahora define ampliamente como “invasión” al tiempo que se declara “macronista” en eso de que “no hay que humillar a Rusia” y que hay que ir al dialogo con Moscú.
Este viernes, la delegación argentina escuchó del Presidente de los Estados Unidos algo con mucha preocupación. Que de información clasificada que no podía compartir surgía evidencia de que la guerra en Ucrania podría terminar en una Tercera Guerra Mundial.
Se le escuchó decir en ese tren que Putin estaría dispuesto a utilizar armas tácticas, misiles atómicos, lo que obligaría a Estados Unidos a entrar en acción militar más de lo que ya lo hace por Ucrania.
Otro hecho importante de este viaje para Fernández es su primer diálogo con Jair Bolsonaro. Fue de pie a un lado del salón y los argentinos alardeaban de que fue un movimiento que buscó el presidente brasileño para “molestar” a Lula en medio de la campaña electoral que se definirá en octubre. Aun así hablaron de cuestiones importantes. Una de ellas es la cuestión del futuro y la producción de alimentos y el potencial energético de los países del Sur. En ese tren, también se habló de una idea de los mexicanos de crear una organización de países productores de litio, que incluya a la Argentina, Brasil, Bolivia, México y Paraguay.