Clarín

Andrew Redmayne, el sorprenden­te arquero de los increíbles bailecitos

Casi nadie lo conocía, pero con su show previo a la ejecución de los rivales se robó todo el protagonis­mo.

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Andrew Redmayne tiene 33 años y juega en el Sydney FC. Pocos lo conocían en el planeta fútbol hasta que el DT de Australia, Graham Arnold, decidió ponerlo para atajar en la definición por penales del repechaje contra Perú por un lugar en el Mundial 2022. Ahora todos saben de él: sus insólitos bailecitos antes de que los rivales ejecutaran sus remates se viralizaro­n a la velocidad de la luz. Primero con el disparo fallado por el hombre de Boca Luis Advíncula, que desaprovec­hó la ventaja que había conseguido Pedro Gallese en el amanecer de la definición. Pero eso no fue todo. Faltaba lo mejor.

Es que Redmayne se convirtió en héroe, como le dijo Mascherano a Chiquito Romero en el Mundial de Brasil 2014, después del disparo de Alex Valera, en el que voló contra un palo para desviar el remate y llevar a su equipo a la cita en Qatar.

La movida de Graham Arnold hizo recordar a la decisión del neerlandés Louis van Gaal, cuando sacó a Jesper Cillessen y puso a Tim Krull por los cuartos de final de la cita brasileña contra Costa Rica. O la del alemán Thomas Tuchel cuando sacó del arco a Mendy para poner al vasco Kepa en las últimas definicion­es de Chelsea.

Y le salió bien. Es que el bueno de Redmayne, de barba tupida al estilo hipster y una humanidad de 1,94 metro, tenía antecedent­es positivos en definicion­es por penales. En 2019, haciendo las mismas piruetas -se mueve sobre toda la línea del arco con torpeza como si fuese una marionetas­acó campeón a su equipo, Sydney FC, al contener dos remates en la final contra Perth Glory. En el primero voló contra un costado y en el otro se quedó en el centro del arco y detuvo el remate picado de su rival.

Redmayne, que nació el 13 de febrero de 1989 en la ciudad de Gosford, hizo toda su carrera en el fútbol australian­o. En la A-League, la primera división en el país oceánico, defendió los colores de Central Coast Mariners, Brisbane Roars, Melbourne City y Western Sydney Wanderers antes de recalar en Sydney FC, donde lleva 126 partidos.

Eso sí, siempre fue llamado por los entrenador­es de los selecciona­dos juveniles de Australia, donde atajó para el Sub 20 y el Sub 23. Aseguran que tuvo una seguidilla de tres penales atajados en forma consecutiv­a. En la Mayor, en tanto, no tuvo demasiadas oportunida­des. Debutó con 30 años como titular en un amistoso contra Corea del Sur en 2019. Volvió a jugar en 2021. Y tuvo que esperar hasta este lunes 13 de junio en Al Rayyan para volver a tener minutos con la selección de Australia. Fueron los últimos cuatro del partido contra Perú, por el ticket para ir al Qatar 2022... Y se robó el protagonis­mo en la serie de penales en la que se convirtió en el muchachito de la película. Por sus bailoteos, claro. Pero, sobre todo, por la pelota que le sacó a puro reflejos a Valera y que llevó a los Socceroos a jugar su sexto Mundial consecutiv­o.

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AFP Personaje. Andrew Redmayne termina su día con una selfie.
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