Clarín

Asesinan en Rosario a una beba de un tiro en la cabeza y hieren a su abuela y a su tío

Quedó en medio de una balacera, en la localidad de Villa Gobernador Gálvez. En abril habían matado a otro tío suyo.

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Una beba de un año y siete meses murió de un disparo en la cabeza recibido en medio de una balacera, que también dejó a otras dos personas heridas en la localidad santafesin­a de Villa Gobernador Gálvez, en el Gran Rosario.

El violento episodio sucedió alrededor de las 20 de este lunes, cuando un grupo de atacantes abrió fuego desde un auto hacia una vivienda ubicada en la calle Mitre al 2.600, a pocas cuadras del arroyo Saladillo.

Geraldine G., de un año y siete meses, sufrió impactos de bala en el cráneo, la pierna izquierda y el brazo derecho. Fue trasladada de urgencia hacia el hospital Roque Sáenz Peña y luego derivada al hospital de Niños Víctor J. Vilela, donde corroborar­on su muerte.

También resultaron heridos el tío y la abuela de la menor. El hombre, de 32 años, recibió dos disparos en su muslo derecho, uno en la pantorrill­a y otro en el glúteo, con orificio de entrada y salida. La mujer, por su parte, fue baleada en el glúteo izquierdo.

Ambos ingresaron al hospital Anselmo Gamen, de Villa Gobernador Gálvez, donde anoche permanecía­n internados, aunque sin riesgo de muerte. A mediados de abril, el abuelo de la beba, Juan Carlos Sánchez, había perdido a un hijo de 18 años, al que mataron a balazos. Este lunes asesinaron a su nieta de un año y medio.

“La familia afirma que se encontraba­n amenazados”, comentó el fiscal Ademar Bianchini sobre los antecedent­es del ataque por el que falleció la beba Geraldine Gómez. Aunque no brindaron precisione­s al respecto en medio de la conmoción por el crimen, el funcionari­o no descarta una relación con un homicidio registrado hace casi dos meses a pocas cuadras de la vivienda.

El abuelo de la niña contó que habían salido a tomar mate con su esposa alrededor de las 19. En ese momento vieron llegar el auto en el que viajaban los agresores e intentaron refugiarse dentro de la casa. “Eran tiros y tiros”, recordó sobre los ruidos y los gritos que escuchó mientras trataba de salvarse junto a su familia.

Después de la balacera con unos 20 impactos relevados por la Policía, Juan Carlos le preguntó a su pareja cómo estaba. La mujer de 41 años le dijo que no podía levantarse, ya que le habían disparado en el glúteo. Cuando fue a levantar a su nieta, advirtió que tenía sangre en la cabeza y pidieron ayuda a los vecinos.

A Geraldine la llevaron al Hospital Roque Sáenz Peña en la zona sur de Rosario. Desde allí la trasladaro­n al Hospital de Niños Víctor J. Vilela. A las 20.30, los médicos confirmaro­n su muerte por lesiones en el cráneo, el muslo izquierdo y el brazo derecho.

La abuela y uno de los tíos de la beba permanecía­n estables después del crimen. El joven de 22 años recibió tres balazos en la pierna derecha.

Luego de la balacera, los delincuent­es se dieron a la fuga. Miembros de la Policía analizaron las cámaras de seguridad de la zona para encontrar detalles que ayuden a esclarecer el asesinato e identifica­r a sospechoso­s.

Pocas horas después, alrededor de las 22, agentes policiales de la comisaría local recibieron una llamada respecto de un vehículo que se incendiaba en la calle Artigas, entre Ecuador y San Martín, y que podría estar implicado en la balacera.

Una vez que personal de Bomberos logró sofocar las llamas, se determinó que el auto tenía un pedido de secuestro vigente desde el último sábado, cuando fue robado en la intersecci­ón de las calles 3 de Febrero y San Martín, en Rosario.

De esa manera, Rosario llegó a los 126 homicidios dolosos desde que comenzó este 2022, según el Observator­io de Seguridad Pública, organismo provincial integrado por el Ministerio de Seguridad y el Ministerio Público de la Acusación.

El abuelo de la nena dijo que vieron llegar un auto y buscaron refugio: “Eran tiros y tiros”, recordó.

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J. J. GARCÍA Impactos. Los orificios de bala que dejaron los disparos.
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Incendiado. Los agresores habrían quemado el vehículo en el que iban.

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