Las dos “puertas” por las que el FBI podría entrar a la causa de Villena
El embajador de Estados Unidos, Marc Stanley, se mostró cauteloso ayer frente a la dura preocupación de su colega de Israel Galit Ronen por la aparición del avión venezolano-iraní. Dijo que sigue la causa judicial "con gran interés". Pero, por lo menos, dos medidas que se tramitan en ese caso involucran más a su país.
Por un lado, el juez Federico Villena pidió a organismos de Inteligencia de EE.UU. que confirme la identidad
del piloto iraní Gholamreza Ghasemi y sus antecedentes. Es decir, si es accionista de una empresa acusada por EE.UU. de dar apoyo logístico al terrorismo internacional o en forma directa es un oficial de las tropas Al Quds de Irán. Para eso, había mandado el pasaporte y las huellas dactilares de Gashemi a Washington.
Por otro, diputados de Juntos por el Cambio pidieron al juez federal Federico Villena que solicite colaboración al FBI para identificar a los dueños de la empresa norteamericana Fracht que fue el broker que contrató al Boeing 747 de Emtrasur para traer autopartes a la Argentina.
En un escrito, los legisladores Ricardo López Murphy y Gerardo Milman señalaron que la empresa Franch “fue broker contratado por Faurecia S.A. y/o SAS Automotriz S.A. para traer los autopartes” que se iban a vender a Volkswagen argentina. Es por el vuelo que el avión hizo entre México y Argentina y por el cual la nave terminó retenida en Ezeiza.
Fuentes de la oposición estiman que esas dos medidas pueden ser "la puerta de entrada" para que un fiscal de EE.UU. quiera investigar el caso. Y eventualmente pida el embargo del avión.
Hay varios antecedentes en los cuales EE.UU. llevó a la práctica las sanciones que fijó el Departamento del Tesoro contra Venezuela e Irán por violar los derechos humanos y apoyar el terrorismo, respectivamente. En agosto del 2020, por ejemplo, EE.UU. confiscó en alta mar cuatro buques iraníes que se dirigían a Venezuela cargados con gasolina, por violar las sanciones impuestas por Washington. Aunque el contexto internacional cambió desde la invasión de Rusia a Ucrania de este año y Estados Unidos flexibilizó de hecho sus sanciones contra el régimen chavista por la necesidad de petróleo que tiene el mundo.
Los diputados preguntaron si Fracht chequeó si la empresa venezolana estaba en la lista negra de sanciones de la Oficina para Activos Extranjeros del departamento del Tesoro de EE.UU. (OFAC). “Si fueron informados sobre tripulación, plan de vuelo y demás antecedentes del servicio que prestaron para Faurecia S.A. y/o SAS Automotriz S.A.”, agregaron. En el registro del Condado de Florida, Clarín confirmó que existe una empresa llamada “FRACHT FWO INC.” Y su directorio está integrado por ciudadanos norteamericanos. ■