Su llegada al Real Madrid y la práctica que cambió su carrera

Con apenas 19 años, apenas uno y medio después de debutar en River, Gonzalo Higuaín fue presentado el 21 de diciembre de 2006, junto a Fernando Gago, en el mismísimo estadio Santiago Bernabéu. Junto a él sostuvo la camiseta con su apellido en la espalda Alfredo Di Stéfano, en ese momento presidente honorario del club.

En la conferencia en la que Pipita anunció retiro, el nacido en Brest, Francia, cuando su padre Jorge era futbolista en ese lugar, reveló una anécdota imperdible sobre cuando estaba en el avión rumbo a España.

“Al poco tiempo de mi debut en River vino el Real Madrid a preguntar por mí, mi papá se metió en mi habitación donde estaba durmiendo y no le creí. Pero los rumores eran reales y me compraron con sólo 19 años”, afirmó Higuaín, en la carta que leyó en el inicio de su alocución ante los medios. “Cuando sabía que iba a un vestuario lleno de estrellas, mi papá me dijo que no tuviera miedo, sino respeto y admiración. ‘Si te compraron es porque confían en vos, ellos tienen sus carreras consagradas’, y así fue”, completó.

Así le tocó desembarcar en el Merengue, que en ese momento tenía dentro de su plantel a figuras como Iker Casillas, Fabio Cannavaro, Roberto Carlos, David Beckham, Raúl, Robinho y Ruud Van Nistelrooy, entre otros.

Higuain llegaba a un equipo armado, que buscaba recuperar el cetro de la Champions League, que no ganaba desde 2002 -recién volvió a hacerlo en 2014- y por eso su futuro indefectiblemente tenía destino de préstamo a otro club o foguearse en el Real Madrid Castilla, el filial. Todos pensaban eso, menos él...

“Cuando llegué, su idea era mandarme a préstamo o al Castilla. Y hubo un partido de entrenamiento, un reducido, donde los más grandes jugaron al 50 por ciento y yo me jugué la vida”, recordó Gonzalo.

“Y gracias a eso Fabio Capello dijo ‘Este chico se queda’. Y ese partido cambió mi destino en el Real Madrid. A los 4 días jugué de titular una Copa del Rey con 19 años”, agregó sobre aquel duelo ante el Real Betis, que terminó 0-0 por la ida de los octavos de final.

Después de aquella práctica, el Pipita estuvo siete temporadas en la Casa Blanca, donde jugó 264 partidos y convirtió 121 goles. Además, ganó seis títulos: tres Ligas, dos Supercopas de España y una Copa del Rey.w