Una muestra de Goya invita a contar qué es un disparate
Incluye grabados poco conocidos del maestro español donde muestra su crítica social aguda y su humor negro.
Que el dólar esté cerca de los 500 pesos o que la Argentina sea un país rico sumido en la pobreza resulta un disparate tan comparable como los grabados que Francisco de Goya y Lucientes (1746-1828) realizó hace dos siglos atrás, y cuya obra atrapa al público en el Museo de Arte Español Enrique Larreta.
Goya. Los disparates. Hermetismo, subversión y fantasía es la muestra que rescata los últimos grabados del célebre artista español, uno de los más grandes del arte universal, autor de pinturas inmortales como La maja desnuda y La maja vestida. Aquellos trabajos que no pudo mostrar en vida se exhiben hasta el 27 de agosto en el museo del barrio porteño de Belgrano y forman parte de una colección privada.
Más de 700 personas visitaron el museo en el primer fin de semana, en una exposición que fusiona la historia con lo lúdico: además de los grabados, el público podrá dejar mensajes utilizando la temática del disparate, el mismo concepto en el que Goya se basó en realizar su obra.
“Aquí los visitantes podrán pensar, reflexionar o intuir cuáles son los disparates de su vida y cómo poder relacionar la obra de Goya con el presente, con el siglo XXI en Argentina”, explica a Clarín Cultura Patricia Nobilia, investigadora y curadora de la muestra que ya es furor en el Larreta.
Además de sus pinturas, Goya, figura clave de la modernidad, realizó una extensa obra en grabados que retrata a la sociedad de su época bajo una mirada crítica aún vigente.
Los Disparates, la última serie de grabados de Goya, se realizó entre 1816 y 1823. Esta colección nunca se estampó en vida del artista, sino recién en 1864, casi cuatro décadas después de su muerte.
En el Larreta hay unos 60 grabados distribuidos en tres salas. Algunos pertenecen a la serie Los Caprichos, anterior a Los Disparates. Por eso, la muestra, que incluye una serie de estampas poco conocidas, propone un recorrido cronológico para entender mejor la serie, la más compleja de sus obras.
Primero habrá que ingresar a la sala donde se exhibe al Goya grabador.
Aquí el artista domina las técnicas más importantes de su época mediante el uso del aguafuerte, punta seca y aguatinta, logrando extraer todas sus posibilidades a través de contrastes de luz, volúmenes y texturas. Goya explora su libertad creativa ya que estos trabajos no fueron hechos por encargo.
La serie Los Caprichos es la más famosa. Son grabados con humor ácido, mordaz e ironía en el que el artista resalta la hipocresía de la sociedad española. También critica al clero, al matrimonio por conveniencia, a la educación, a los militares y a la Inquisición. Allí está el autorretrato número uno de Goya que el artista realizó en 1799 utilizando la técnica del aguafuerte, aguatinta, punta seca y escopio.
Desastre de la Guerra es otro de los grabados de Los Caprichos. Goya lo hizo en 1808, en plena Guerra de la Independencia española, donde fue testigo. Quedó desilusionado con las ideas liberales y la Revolución Francesa que manifestaba cuando Napoleón invadió España. La crueldad de los acontecimientos le generó una gran contradicción, peleas y decepción, y debió exiliarse.
En otras estampas, realizadas entre 1810 y 1814, Goya exaltó a la razón y al valor instalando la irracionalidad, el drama y la muerte como temas centrales de la época y la ferocidad de un pueblo español irritado de los políticos que buscaban aprovecharse
de las circunstancias, los fusilamientos, los saqueos, la destrucción de ciudades sitiadas, el sufrimiento, el hambre y la miseria.
La sala cuenta con grabados vinculados a la Tauromaquia con la figura de Mariano Ceballos, alias “El indio”, el primer torero argentino. También se destaca un grabado de una mujer anciana que quiere verse bella hasta el final. En este espacio hay un video que muestra la técnica del grabado con el cobre, la plancha, aguafuerte y aguatinta, la misma que empleaba Goya hace dos siglos atrás consagrándose como excepcional artista.
Cinco mujeres revolean a un hombre Esta serie poco conocida se exhibe en la sala Josefina del Larreta y es el
corazón de la muestra. Son obras de
1815-1819 que salieron a la luz 40 años después de su muerte, cuando su hijo las descubrió en la casa que Goya tenía en Madrid. Estos trabajos aluden al carnaval.
Goya se basó en esta palabra que por lo general se utiliza para designar el desatino, la locura o lo absurdo. Por eso, estas obras son las más difíciles de interpretar ya que el artista explora el mundo de lo irracional atravesando la frontera de la realidad y la fantasía.
Se destaca Disparate femenino: su creador alude al pelele, un típico juego de carnaval en el que un muñeco es arrojado a lo alto como símbolo de liberación de ciertos males.
En este caso, 5 mujeres revolean a un hombre, burlándose de la “estupidez” masculina. La imagen cuenta con otras figuras enigmáticas como un burro y otro hombre.
Para descubrirlos, habrá que acercarse al grabado de Goya, Disparate de miedo, que representa una muerte tramposa o al miedo de asustarse. Sobresale el rostro de un hombre que se ríe escondido en un disfraz. Goya aquí critica la superstición. En cambio, en Disparate pobre, el artista resalta la ambigüedad.
En Disparate desordenado se refiere al matrimonio, con hombres y mujeres unidos como si fueran siameses. “¿Los pies, hacia qué lado van? Hay que ver los detalles. De eso se trata la Modernidad de Goya, su vanguardia”, explica Nobilia.
También está Disparate de carnaval, con figuras enmascaradas que se burlan de un militar que está dormido o borracho. También hay bromas hacia un cura, una clara burla de Goya al Ejército y a la Iglesia.
Disparate fúnebre se relaciona con la respeto: con figuras que se burlan de un anciano disfrazado en carnaval. En la imagen, hay un perro que lo defiende.
En tanto, en Disparate puntual, hay una mujer equilibrista pero la escena muestra cierta ambigüedad con un caballo blanco pisando una soga. Este grabado engaña: ¿está sujeto en
el aire o en el piso? “Según las interpretaciones, podría ser una sátira política a la inestabilidad del poder y la sumisión del pueblo”, señala la curadora.
En la sala hay un video que muestra los trabajos previos a estos grabados y Disparate animado: una pantalla más grande que exhibe los detalles de cada obra a través de imágenes animadas para descubrir de cerca Los Disparates de Goya.
La tercera sala exhibe estampas poco conocidas y grabados como El pelele. Se destaca un grupo de tres prisioneros con las leyendas “Tan bárbara la seguridad como el delito” y “Si es delincuente que muera pronto”, que el autor puso en sus grabados.
El museo dispone un espacio para que el público pueda dejar sus mensajes. La mayoría tiene connotación política y se refiere a la crisis económica.w
En sintonía con la exhibición, el público puede testimoniar los disparates actuales.