Piden a las automotrices que consigan crédito en el exterior para autopartes
El acceso a los dólares para pagarlas subió de 45 a 75 días. Afecta de 45% a 80% de las partes de cada vehículo local.
El Gobierno acaba de aplicar una nueva restricción para fabricar autos en el país: amplió de 45 a 75 la cantidad de días para que las terminales automotrices puedan acceder al Mercado Único y Libre de Cambios (MULC) del Banco Central para comprar los dólares necesarios para pagar las importaciones de autopartes.
La industria automotriz depende de las importaciones para poder funcionar. Los modelos con mayor integración de piezas locales llegan al 55%, pero son varios los que apenas superan el 20% Pero aun en los casos de mayor integración local, a sus vez esas piezas dependen también de la importación de insumos para su fabricación.
Como atenuante, desde Economía están conversando con las automotrices para que activen en el exterior líneas de prefinanciación para conseguir los dólares en los países de destino donde van los autos que se producen en el país. Actualmente el 60% de las exportaciones tienen como destino Brasil, seguidas por Colombia (8,4%), el conjunto de países de América Central (8,4%), Chile (8,3%) y Perú (7,4%).
Esa decisión, confirmada a Clarín desde cuatro de las terminales que integran la Asociación de Fabricantes de Automotores (ADEFA), se enmarca en la sequía de dólares del Banco Central y la necesidad del ministerio de Economía de “priorizar” (el término fue acuñado desde el equipo de Sergio Massa) a quién se le venden dólares a precio oficial de inmediato y a quiénes se les posterga los pedidos para más adelante.
“Es algo que se está comenzando a conversar y todavía no sabemos bien cómo sigue. Por ahora lo único concreto es que para las autopartes nos pasaron de 45 días a 75 el plazo para poder pagarlas. Si nosotros conseguimos un banco que nos preste, quizás podamos sostener el ritmo de pago que habíamos tenido hasta ahora en el caso de las autopartes, que era de 45 días y con el cual no había discusión con los proveedores”, dijo el director de una de esas empresas.
En Gobierno ya venía estirando las autorizaciones para el acceso a los dólares del Central a precio oficial para pagar la importación de vehículos terminados (ver nota en esta misma página).
Tanto en abril como ahora en mayo, la Secretaría de Comercio emitió autorizaciones del Sistema de Importaciones (SIRA) para importar vehículos con fecha para pagarlos en los primeros días de diciembre.
Las autorizaciones que salieron a fines de abril establecieron una demora de 210 días. Y las que están saliendo a fines de mayo tienen un plazo de 195 días. De esa forma, quien deberá facilitar a las automotrices el acceso a los dólares para las importaciones de estos últimos dos meses será el próximo gobierno que asuma el 10 de diciembre.
Aquellos plazos son para los vehículos importados. El caso de las autopartes es diferente, ya que su impacto potencial no sólo es sobre la oferta comercial, sino sobre la actividad de las fábricas.
Entre las terminales automotrices y sus proveedoras autopartistas se estima hay unos 100.000 operarios directos, sin contar a las empresas que les abastecen insumos, logística y otros servicios.
Hasta el momento, la falta de autopartes no impactó hasta el límite de paralizar por completo la actividad del sector. Pero a lo largo de 2022 hubo casos aislados a causa de las sucesivas trabas.
A mediados de ese año paró por dos jornadas la línea de ensamblado de pick ups Nissan y Renault, en Córdoba. Después de aquel episodio sobrevino el conflicto gremial de las tres fábricas de neumáticos, lo cual generó la salida de producción durante casi una semana de Ford y Toyota.
En octubre la fábrica de Fiat, en Córdoba, debió detener su actividad durante dos turnos, nuevamente por problemas en la importación de insumos.
En la semana siguiente fueron las últimas paradas por falta de insumos: frenó nuevamente Fiat (en dos jornadas) y la línea de pick ups de Renault y Nissan, durante cuatro días.w