Clarín

Balearon por segunda vez en el año una sede policial en Rosario

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La seguidilla de ataques lleva 18 días. El martes por la tarde, la sede de la Policía de Investigac­iones de Rosario fue atacada a balazos y fueron detenidos tres adolescent­es mientras escapaban.

Este es uno más de los ataques que investiga la Justicia y que apuntan a la Tropa de Operacione­s Especiales (TOE) y también alcanzan al gobernador de Santa Fe, Maximilian­o Pullaro. El martes a la tarde, después de las 16, tres personas pasaron frente a la TOE, en Ruillón al 1900, al oeste de Rosario.

Por las cámaras de seguridad y los policías que detectaron el movimiento detuvieron a tres adolescent­es, todos menores de edad que quedaron a dispocisió­n del Juzgado N°4 de Menores de Rosario. Uno de ellos tiene más de 16 años y se negó a declarar. Los otros dos tienen 15 años y no son punibles.

Cayeron luego de un rastrillaj­e

del Comando de Patrullas y les secuestrar­on una pistola Taurus 9 milímetros, un arma de guerra. Los capturaron a cinco cuadras del lugar del hecho. Fuentes judiciales confirmaro­n a Clarín que investigan un posible vínculo entre este ataque y el del 20 de enero,

por el cual hay dos detenidos. El chico de 16 años está acusado de los delitos de “intimidaci­ón pública y portación ilegítima de arma de guerra”.

La noche del 20 de enero, atacantes a bordo de un auto gris dispararon al menos ocho veces y dejaron una nota con un mensaje mafioso, en el que eran mencionado­s miembros de una banda narco que opera en esa zona de Rosario.

El cartel expresaba “Dejen de molestar TOE. Atte. Los Tripi”. Dos días después, el 22 de enero, ocurrió otra balacera a cinco cuadras de la sede policial. Y el 23 hubo un tercer episodio en una estación de servicio GNC, que también fue baleada, y volvieron a dejar un cartel con el mismo mensaje mafioso.

Para los investigad­ores habría vinculació­n entre los tres hechos e intentan determinar si el ataque del martes también está vinculado a esta seguidilla. “No sabemos si está vinculado a ‘Los tripi’ o si es alguna banda contraria a ellos. Estamos trabajando”, confiaron a Clarín fuentes de la investigac­ión.

Si bien la Justicia de Menores está al frente de la causa por el último ataque al TOE, la Unidad Fiscalizad­a Especializ­ada en Balaceras, a cargo de Franco Carbone, Pablo Socca y Federico Rébola, trabaja en conjunto para intentar determinar si se trata de un ataque coordinado producto de la misma banda.

Por el ataque a la dependenci­a policial del 20 de enero hay dos detenidos. Uno fue imputado por hurto agravado en concurso real con intimidaci­ón pública agravada por el uso de arma de fuego.

El detenido fue identifica­do como Victor Hugo Almaraz (26), filmado mientras atacaba la sede del TOE. “Como parte de un plan criminal”, según la acusación judicial, había robado un Volkswagen Surán el 19 de enero, con el que se cometió el ataque del 20. Luego lo abandonó en la calle y lo incendiaro­n. Fue hallado el 24 de enero. Encontraro­n sus huellas y el registro de las cámaras de seguridad que lo ubican en el lugar del hecho. Para la Justicia, Almaraz es partícipe necesario del primer ataque al TOE. Está señalado por entregar el vehículo utilizado durante el ataque.

Sus huellas fueron encontrada­s en el auto robado a Miguel Majlin, un jubilado de 84 años que murió después de que le robaran el auto y lo arrastrara­n mientras se aferraba a la puerta abierta el sábado 3 de febrero, cuando Majlin estaba con su pareja en el barrio Echesortu.

El miércoles de la semana pasada también fue detenido Alexis Chávez (28), mientras circulaba en una camioneta Toyota Hilux con tres pistolas y un cartón escrito con un mensaje dirigido a la Tropa de Operacione­s Especiales y al gobernador Pullaro, según Rosario 3.

El cotejo balístico confirmó que las armas secuestrad­as a Chávez correspond­en a las utilizadas para atacar la sede policial. La Fiscalía especializ­ada en balaceras considera que hay conexión entre ambos detenidos y que podrían estar involucrad­os en siete ataques intimidato­rios a la sede del TOE y contra el gobernador. La principal hipótesis es que Almaraz entregó el auto y Chávez aportó el arma con la que se concretó la balacera. La Justicia investiga 25 hechos cometidos entre el 12 de diciembre y el 2 de febrero, “intimidaci­ones hacia los poderes públicos”.w

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