Fuerte choque entre la diplomacia israelí y el Vaticano por Gaza
Pietro Parolin, el “2” del Papa, pidió frenar “la carnicería” en la Franja. “Una declaración deplorable”, le replicaron.
La embajada de Israel ante la Santa Sede y el Vaticano se enfrentaron ayer con dureza por las declaraciones del secretario de Estado del Papa. Mientras el cardenal Pietro Parolin cuestionó los continuos bombardeos sobre la Franja de Gaza como “no proporcionales” y pidió frenar “esta carnicería”, la legación israelí en Roma emitió un comunicado en el que tildó de “deplorables” las palabras del purpurado.
“La Santa Sede lo ha dicho desde el principio: por un lado, una condena clara y sin reservas de lo ocurrido el 7 de octubre. Pero al mismo tiempo, también una petición de que el derecho de Israel a la defensa que se invocó para justificar esta operación sea proporcionado y ciertamente con 30.000 muertos no lo es”, denunció Parolin al participar en la noche del martes de un encuentro en la embajada vaticana ante Italia.
“Hay una voz generalizada de que no podemos seguir así. Necesitamos encontrar otras maneras de resolver el problema de Gaza, el problema de Palestina”, reclamó. “Creo que todos estamos indignados por lo que está pasando, por esta carnicería, pero hay que tener el valor de seguir adelante y no perder la esperanza porque, si perdemos la esperanza, nos cruzamos de brazos”, concluyó.
Sus declaraciones han soliviantado a la diplomacia israelí ante la Santa Sede y su respuesta fue inmediata: “Es una declaración deplorable. Juzgar la legitimidad de una guerra sin tener en cuenta todas las circunstancias y datos relevantes lleva inevitablemente a conclusiones equivocadas”, arremetió en un comunicado.
La embajada de Israel ante la Santa Sede pidió al Vaticano tener en cuenta que Gaza “ha sido transformada por Hamas en la mayor base terrorista jamás vista”.
“Apenas hay infraestructuras civiles que no hayan sido utilizadas por Hamas para sus planes criminales, incluidos hospitales, escuelas, lugares de culto y muchos otros”, enfatizó en el texto. “Los civiles de Gaza también participaron activamente en la invasión no provocada del 7 de octubre del territohan rio israelí, matando, violando y tomando como rehenes a civiles. Todos estos actos se definen como crímenes de guerra”, agregó e indicó que la respuesta del ejército “se lleva a cabo en pleno cumplimiento del derecho internacional”.
Por último, justificó que “por cada militante de Hamas asesinado han perdido la vida tres civiles” mientras que “en las guerras y operaciones de las fuerzas de la OTAN u occidentales en Siria, Irak o Afganistán la proporción era de 9 ó 10 civiles por cada terrorista”.
“No es suficiente condenar la masacre genocida del 7 de octubre y después apuntar el dedo contra Israel referiéndose a su derecho a la existencia y a la autodefensa solo como un simple acto debido y no considerar el contexto general”, terminó la embajada.
Ayer, el Ministerio de Salud de Gaza, controlado por Hamas, como ocurre con otras estructuras del gobierno gazatí, anunció que suman al menos 28.576 las personas que muerto en la Franja de Gaza, en su mayoría mujeres, adolescentes y niños, desde el inicio de la guerra. En tanto, 68.291 personas resultaron heridas desde el 7 de octubre, según el Ministerio.
El Papa, que en 2014 juntó en el Vaticano al entonces presidente israelí Simon Peres y al de la Autoridad Nacional Palestina Mahmud Abás, para orar por la paz, sigue con pesar la guerra en Tierra Santa.
La posición del Vaticano, que aboga por la creación de dos Estados, quedó ayer por escrito en un editorial de su periódico oficial, el L’Osservatore Romano, titulado “Detener la matanza”.
“Para la Santa Sede la toma de posición es siempre con las víctimas (...) Nadie puede definir lo que ocurre en la Franja de Gaza como un ‘daño colateral’ de la lucha al terrorismo. El derecho a la defensa, el derecho de Israel a llevar a la justicia a los responsables de la masacre de octubre no puede justificar esta matanza”, sostuvo.w