Tributo de la embajadora de Biden en un memorial de Moscú
La embajadora de EE.UU. en Rusia, Lynne Tracy, visitó ayer un memorial improvisado en Moscú en homenaje al opositor Alexey Navalny, cuya muerte en prisión movilizó a muchos ciudadanos que buscaron rendirle un tributo, pese a la prohibición de las autoridades.
Los grupos de defensa de los derechos humanos reportaron que cerca de 400 personas fueron detenidas hasta ayer en concentraciones en recuerdo de Navalny, el más prominente crítico de Vladimir Putin, que murió a los 47 años en la prisión donde estaba recluido en el Ártico el viernes.
El memorial al que concurrió la diplomática es la Piedra Solovetski, un monumento en homenaje a la represión durante el período soviético que se ha convertido en un lugar de peregrinación para los partidarios de Navalny.
“Hoy en la Piedra Solovetski lloramos por la muerte de Alexey Navalny y por las otras víctimas de la represión política en Rusia”, indicó la embajada de EE.UU. en Moscú en una publicación en las redes sociales, acompañada por la foto de la embajadora en el memorial.
“Le extendemos nuestras más sentidas condolencias a la familia, a sus colegas y a los simpatizantes de Alexey Navalny. Su fortaleza es un ejemplo de inspiración”, añadió la delegación estadounidense. En otro memorial improvisado en Moscú, instalado en un lugar conocido como el “Muro del Dolor”, un monumento de bronce en recuerdo de la represión de la era soviética, la Policía colocó vallas para intentar alejar a los partidarios de Navalny. Varias decenas de policías fueron desplegados, pero algunas personas lograron pasar las vallas y colocar sus flores.
Navalny purgaba una condena de 19 años por “extremismo”, y era percibido por muchos como la mayor esperanza de un cambio en Rusia. El anuncio de su muerte aún no aclarada causó desazón entre sus partidarios, muchos de ellos jóvenes, condenas de las potencias occidentales y acusaciones de que las autoridades rusas son responsables de su fallecimiento.▪