Un doblete de Méndez hizo festejar al invicto Estudiantes
Macagno era el muro de la resistencia de Newell’s, que jugaba con 10 por la roja a Banega, hasta que un gol de carambola abrió el marcador en La Plata.
Los mosquitos invaden La Plata y Estudiantes, el área de Ramiro Macagno. Sobrevuela el gol, pero el arquero de Newell’s tiene un repelente para cada ataque. Pican pero no pinchan los platenses, a contramano de ese apodo que los acompaña desde la década del sesenta. Hasta que Mauro Méndez encuentra la fórmula del gol. Y el equipo de Domínguez destraba el partido justo antes del duelo con Gimnasia y fumiga la resistencia rosarina, que no sólo lamentará el resultado: también, la expulsión de Ever Banega, su gran figura y capitán.
Intenso. Caliente. Polémico. Estudiantes y Newell’s protagonizaron un primer tiempo que estuvo marcado por un ida y vuelta que no tuvo tantas situaciones de gol, pero encontró un atractivo por la dinámica que le imprimieron unos y unos. Con dos jugadas que ameritaron la revisión del VAR.
Primero Banega fue a disputar una pelota con Ascacibar y metió un planchazo sobre la rodilla del volante platense. Para Rey Hilfer era suficiente con la aplicación de la amarilla. Sin embargo, recibió un llamado de Trucco y repasó la jugada a través del monitor. Entonces cambió su decisión preliminar y le mostró la roja al referente rosarino. Como la intención no se juzga, la sanción estuvo correcta.
Al ratito, hubo otra jugada controversial. Sosa cortó con una patada de atrás a Velázquez. En este caso, el Príncipe fue directamente a una falta táctica. Lo hizo con vehemencia. Para Rey Hilfer también mereció la amonestación. Trucco volvió a convocar al juez principal, quien esta vez mantuvo el criterio.
Con un hombre menos, Newell’s intentó maquillar la ausencia de su líder futbolístico con más vértigo que claridad. Aguirre pudo marcar el primero con un remate que se perdió por encima del travesaño.
Domínguez no perdió tiempo. Cuando el reloj había cruzado la frontera de la media hora, metió dos cambios. Sacó a Zuqui y Zapiola y mandó a la cancha a Mauro Méndez y Cetré. Entonces su equipo tuvo más agresividad.
La más clara estuvo en la cabeza del colombiano, cuyo cabezazo de pique al césped encontró una gran respuesta de Macagno.
El arquero se estaba corporizando en un muro durante el segundo tiempo con otras tres sensacionales tapadas: un remate de Altamirano, un mano a mano con Méndez y un remate de Sosa tras una pared con el chileno. Los intentos locales morían en sus guantes.
Hasta que Estudiantes encontró el gol de carambola. Se juntaron dos de los ingresados, Eric Meza y Tiago Palacios, sacudió el uruguayo de media distancia, su compatriota Méndez corrigió la dirección y Macagno no tuvo nada que hacer.
Justo un instante después de un remate de Guillermo May en el travesaño, Estudiantes logró la ventaja y Newell’s, que la había peleado, quedó regalado. En el final, de contraataque, Ascacibar habilitó a Correa, el cordobés asistió a Méndez y el centrodelantero firmó el doblete y el triunfo de Estudiantes, que escala en la Zona B.w
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