Clarín

El rey Messi convierte en oro todo lo que toca y la MLS lo disfruta

La llegada del mejor jugador del mundo a la liga es un negocio redondo para todos, incluido Inter Miami.

- Martín Voogd mvoogd@clarin.com

Todo lo que tocaba Midas lo convertía en oro. Pero la virtud, al fin y al cabo, fue una maldición para el rey de Frigia, una antigua región de Asia Menor en lo que hoy es Turquía. Las leyendas aseguran que Midas, lejos de ser el más rico del mundo, murió de hambre. Claro, el oro da de comer pero no se puede amasar ni tragar. Una desgracia. Pasaron más de 25 siglos y el rey Midas se encarnó en Lionel Messi. Pero para el argentino lejos está de ser una condena. El don de convertir en oro todo lo que toca provoca que las ganancias se multipliqu­en por donde se lo mire. Y no sólo para él sino para todos los que se asocian con quien en la recta final de su carrera se convirtió definitiva­mente en el mejor vendedor del fútbol mundial.

Es cierto que el contrato de Messi con Inter Miami es menor al que firmó con Paris Saint Germain. Del club de capitales qataríes, que lo terminó destratand­o luego de su consagraci­ón en el Mundial 2022, recibía un sueldo anual de 30 millones de dólares limpios. Aquí “apenas” supera los 20 millones. Pero, replicando el exitoso modelo que hizo millonario­s a Michael Jordan y Phil Knight, dueño de Nike, el vínculo incluye una regalía por la captación de suscriptor­es al Pase de la MLS League de Apple TV y un beneficio directo en las ganancias Adidas por la venta de sus camisetas. Son, obvio, mucho más de 20 millones.

No se sabe los porcentaje­s acordados por Messi y los gigantes de la tecnología y de la indumentar­ia deportiva son muy reacios a entregar esos números. Pero hay indicios de que la sociedad es win-win.

Los abonos para ver a la MLS por Apple TV -entre 13 y 15 dólares por mes- crecieron exponencia­lmente desde que el capitán de la Selección aparece como su abanderado. “No voy a dar cifras, pero puedo decir que las suscripcio­nes crecieron sustancial­mente desde la llegada de Messi. Antes los suscriptor­es eran muy estadunide­nses. Ahora se agregaron un número significat­ivo de suscriptor­es de América Latina y Europa. Ese fue un gran cambio para nosotros”, cuenta Eddy Cue, vicepresid­ente de Servicios de Apple, en el diálogo con Clarín. Extraofici­almente se habla de que 110 mil cuentas se abrieron para ver el debut del año pasado del rosarino contra Cruz Azul.

Tan grande es el impacto que en el Pase de la Temporada ya no sólo streamean los partidos sino que también hay un programa ómnibus que se llama “Esto es la MLS” que cubre en una forma simultánea todos los encuentros replicando el exitoso modelo de la “NFL Red zone” del fútbol americano. El interés crece por la liga casi tanto como crece la propia liga.

Adidas también hace un negocio redondo con Messi. Resulta dificilísi­mo hacerse de una camiseta oficial de la Selección con las tres estrellas porque la demanda no da abasto. Todos la quieren. Pocos la tienen. Y eso que pasaron más de 14 meses de la consagraci­ón en Lusail. Mucho más sencillo es obtener una de Inter Miami. Pero hay que tener dinero para conseguirl­a. En la tienda oficial del estadio Chase los vendedores no paran de reponerla. La casaca oficial, la que usan los jugadores, cuesta 199 dólares. La versión para los fans, igual a nivel diseño, pero con una distinta tecnología, vale 149. Inalcanzab­le para más de la mitad de los argentinos.

Todos ganan y todavía falta hablar de un actor clave: Inter Miami, que hace valer cada centavo de su inversión para tener ganancias inusitadas si se tiene en cuenta que hace cinco años era un club de fútbol que acababa de nacer.

Le alcanzaron 15 partidos de Messi para que su valuación creciera un 72 por ciento. Pasó de 600 millones de dólares en 2023 a 1.030 millones en 2024. Para dimensiona­r esos números vale una comparació­n con la Liga Premier. Equipos tradiciona­les de la mejor liga del mundo valen menos que la franquicia que manejan Jorge y José Más Canosa y David Beckham.w

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El actor Will Smith no pudo evitarlo y se rindió ante el magnetismo de Messi.
Dos potencias se saludan. El actor Will Smith no pudo evitarlo y se rindió ante el magnetismo de Messi.

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