Báez y Navone son finalistas y habrá un campeón argentino
El ATP 500 de Río de Janeiro se vestirá de celeste y blanco. Báez irá por su quinto título, el primero del año, y Navone es la relelación del torneo.
Por segunda vez en la historia del Abierto de Río de Janeiro, como en 2018 cuando se coronó Diego Schwartzman tras superar en la final a Fernando Verdasco, habrá un campeón argentino. Sebastián Báez y Mariano Navone serán los protagonistas de la final que se disputará hoy a las 17.30 en el estadio Guga Kuerten.
En el primer turno de ayer, en un partido que enfrentó a dos de los mejores tres tenistas de nuestro país, hubo un ganador claro. Báez, 30° del mundo y quinto preclasificado, se convirtió en el finalista al vencer a Francisco Cerúndolo por 7-5 y 6-0 en una hora y 24 minutos de juego.
Navone (113°) dejó más tarde en el camino al británico Cameron Norrie con un contundente 6-4 y 6-2 y vive un sueño. Es que ganó esta semana su primer partido del circuito y no fue uno sino cuatro en fila. Venía de un esforzado triunfo ante Joao Fonseca, la sensación brasileña de 17 años, y antes había superado a Mateus Alves y Genaro Olivieri en la clasificación y a Federico Coria y Yannick Hanfmann en sus primeros dos partidos del cuadro principal.
Báez tuvo que esforzarse primero para terminar completando un cómodo triunfo. Cerúndolo tuvo en sus manos el primer set cuando estuvo 5-4 y desperdició tres set points sobre el saque de su rival que a partir de allí ganó nueve games consecutivos. Brutal.
Cerúndolo acusó el desgaste físico. “Se termina una buena semana en el @RioOpenOficial recuperando buenas sensaciones. Se acabo el tanque de nafta, se dio todo lo que había. Felicitar a Seba y su equipo por el partido y lo que vienen haciendo. Seguimos metiendole, gracias!”, posteó tras el encuentro.
De esa manera Báez disputará la séptima final de su carrera y la primera en un ATP 500. Sus seis definiciones
anteriores, con cuatro títulos y dos derrotas, fueron en ATP 250.
En su vitrina reposan los trofeos de Estoril en 2022 y Córdoba, Kitzbühel y Winston-Salem en 2023 mientras fue finalista en Santiago y Bastad en 2022. Desde el lunes será, de mínima, 23° del ranking mundial. Si gana escalará hasta la 21° ubicación. Cerúndolo se mantendrá como el N°1 argentino en el 20° puesto.
“Estoy feliz por jugar una nueva final”, aseguró Báez.
El triunfo de Navone fue tremendo y se concretó en una hora y 59 minutos. Contra todo pronóstico, el nuevejuliense aprovechó el envión que le da atravesar el mejor momento de su corta carrera y no le dejó chances a Norrie.
Tuvo break points en todos los games con el saque de su rival en el primer set y logró quebrar en el primero y en el séptimo games para llevarse el primer parcial. En el primer set point en contra Norrie le sacó de abajo pero no logró sorprenderlo: fue la mejor muestra del desconcierto del defensor del título. Ya en el segundo set un game de 11 minutos le dio el nuevo quiebre a Navone y el 2-1 pareció ser un momento de quiebre en el encuentro también. Es que a partir de allí fue una tromba para su adversario, quien terminó el partido tocado físicamente por un golpe de calor debido a las altas temperaturas de la ciudad brasileña.
“El tenis tiene estas cosas. La semana pasada perdí en la primera ronda en Buenos Aires, y ahora estoy en la final de un 500”, dijo Navone.
Ya tenía asegurado su ingreso al top 100 y el ranking en vivo lo muestra en el 60° puesto. Si le gana a Báez ascenderá hasta la 40ª ubicación. Además se aseguró un cheque de 211 mil dólares que se acerca a los 244 mil que ganó en toda su carrera hasta llegar a Río de Janeiro. Un momento muy especial para su carrera y para su vida.
Además, Báez o Navone le darán a Argentina un título de un ATP 500 por primera vez desde 2018 cuando Juan Martín Del Potro se alzó con el de Acapulco.▪