Por la inflación, en diciembre se disparó la mora bancaria

La devaluación de diciembre y el fogonazo inflacionario que le sucedió afectó la capacidad de pago de empresas y familias y el índice de morosidad bancaria pegó un salto, en un nivel que no veía desde 2010, cuando comenzó a medirse esa variable.

Según el último Informe sobre bancos que elabora el Banco Central, aunque punta a punta de 2023 la mora bancaria sólo se incrementó en 0,5 puntos porcentuales para cerrar el año en el 3,7%, la variación mensual que registró en diciembre, con un aumento de más del 37%, aparece como uno de los indicadores del recrudecimiento de la crisis. Es que el segmento más afectado fue el de las empresas, donde la mora alcanzó al 4,4% de los créditos otorgados. En tanto, el nivel de mora de las familias se mantuvo debajo del 3%, situado en 2,8% de la cartera de préstamos, según los datos oficiales.

Dentro del sector corporativo, fue la industria la que registró un mayor aumento en los atrasos con los bancos. El salto de 118% del dólar del 13 de diciembre pasado afectó a las que tenían deuda en esa moneda. "El incremento en el mes fue explicado por el segmento de las financiaciones a empresas, principalmente por el efecto de la revaluación de deuda previamente existente en moneda extranjera en situación irregular", explicó el organismo que preside Santiago Bausili.

"El mayor aporte a esta variación lo hace la morosidad de las empresas, lo cual puede ser otro indicador que se suma al recesivo escenario de la economía real", indicaron en Aurum Valores.

El aumento de la morosidad se da en un contexto de amplia caída del crédito bancario. Según el informe del Central "en diciembre el saldo de financiamiento en pesos al sector privado disminuyó en términos reales, con reducciones generalizadas entre los grupos de entidades financieras y las asistencias crediticias. En una comparación interanual, el saldo de crédito en pesos al sector privado se contrajo 23,7% en términos reales".

La caída del crédito se explica por una doble vía: por un lado los bancos restringen la oferta, hasta diciembre debido a que la financiación al Banco Central vía Leliq resultaba menos riesgosa y más rentable, y por otro lado, las empresas y familias tampoco demandan crédito, aún en un contexto de caída del poder de compra de los salarios y reducción de los márgenes de las empresas.

Hasta ahora, pese al salto de los precios de la economía y la presión cambiaria que había aumentado desde la segunda parte de 2023, la morosidad había permanecido prácticamente estable. Los datos de diciembre encienden una luz amarilla que se condicen con los que aportó recientemente el INDEC en el Estimador Mensual de Actividad Económica, que registró un desplome de la economía de 4,5% en el último mes del año.

"Paralelamente, los depósitos del sector privado en pesos también experimentaron una reducción del 22,8% a precios constantes. Los préstamos sobre depósitos totales, presentaron una merma de 10 puntos porcentuales mensual por un incremento de 19 billones de pesos en los depósitos entre noviembre y diciembre de 2023. Esto volvió a situar al ratio en la tendencia bajista presenciada desde el 2020", resaltaron en la consultora Delphos.

El reporte del Central destaca que desde diciembre se introdujeron cambios en la política monetaria. "Se dispuso que la tasa de política monetaria sea la de los pases pasivos para el BCRA, fijándola en un nivel de 100% (TNA). ■