Clarín

Un joven quería entrar a robar a una casa y murió electrocut­ado

- CORRESPONS­AL Ernesto Azarkevich misiones@clarin.com

Un delincuent­e que intentaba ingresar para robar en la casa de sus ancianos vecinos, en la ciudad de Corrientes, murió al tomar contacto con una puerta trasera que había sido electrific­ada con 220 voltios. El intruso, que tenía el rostro cubierto con una remera, falleció en el acto a causa de la descarga.

El hecho ocurrió alrededor de las 18.30 del lunes, mientras llovía intensamen­te. Rodrigo Barrios, de 24 años, estaba al tanto de que la dueña de casa, de 87 años, se encontraba internada en una clínica de la capital provincial y de que su esposo la estaba cuidando. Por eso se decidió a saltar el muro que divide las propiedade­s y se dirigió hacia la puerta orientada hacia el fondo de la modesta vivienda.

El joven no advirtió que la abertura metálica estaba conectada a un cable. Apenas su brazo izquierdo tomó contacto con el metal recibió una fuerte descarga y quedó “pegado”. Un hermano alcanzó a escuchar un grito y, al acercarse al muro, vio a Barrios tirado en el piso, casi colgado de su brazo.

Posteriorm­ente se supo que la pareja ya había sufrido varios robos, por lo cual, antes de dirigirse al sanatorio en busca de atención médica para la mujer, decidió implementa­r un sistema de seguridad tan efectivo como peligroso: electrific­ar las aberturas que dan a los costados y la parte trasera.

Trascendió que, en otra ocasión, Barrios ingresó a la propiedad y se apoderó de materiales de construcci­ón, que vendió a cambio de pocos pesos. Esta vez, el intento de robo terminó en tragedia, en la casa ubicada en Departamen­to Mercedes al 300, a pocos metros de Esteban Bajac, en el barrio Itatí.

Aparenteme­nte no era la primera vez que Barrios -que estaba domiciliad­o en el barrio Sol de Mayo de Corrientes capital- ingresaba a robar algún objeto de valor, para luego cambiar por drogas. Hasta no hace mucho tiempo, el joven se había destacado como un habilidoso jugador de fútbol, pero cayó en la drogadicci­ón y su futuro promisorio ligado al deporte se desmoronó de un día para otro.

El cuerpo de Barrios permaneció en contacto con la corriente durante varias horas, hasta que un equipo de la Policía de Corrientes lo trasladó para que le realizaran una autopsia. Para eso, un equipo de la empresa eléctrica provincial tuvo que cortar el suministro de energía en la vivienda, a fin de evitar otros hechos similares.

Voceros policiales indicaron que, hasta el momento, el fiscal del caso no avanzó en alguna eventual imputación criminal en contra de los dueños de la propiedad asaltada.w

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