Ceden a Fuerza Aérea el manejo de los aviones presidenciales
Milei tomó la decisión del traspaso de los medios aéreos que dependen de la Secretaría General de la Presidencia. Buscan abaratar costos operativos.
El presidente Javier Milei le traspasará a la Fuerza Aérea el manejo de la flota de aviones presidenciales, incluyendo el llamado ARG-01, que compró Alberto Fernandez por 25 millones de dólares para sus viajes y prácticamente no se utilizó.
En ello trabajan ahora Presidencia y el Ministerio de Defensa que, según pudo saber Clarín de altas fuentes del Gobierno, creará un "escuadrón" especial dentro de la Fuerza Aérea para operar esos medios.
Fiel a su estilo de comunicación por Twitter Javier Milei sorprendió al ministerio que comanda el mendocino Luis Petri y al jefe del Estado Mayor Conjunto, Xavier Isaac, que venían trabajando en este cambio de reglas que empodera a la Fuerza Aérea, a las Fuerzas Armadas y busca también abaratar costos operativos.
Ocurre que el Presidente lo que hizo fue fijar posición ayer al retuitear a Dave Benner, uno de los autores de los grupos neoconservadores que sigue y que escribió arrobándolo: "Milei dona la flota aérea presidencial al ejército de Argentina. Ha donado TODA su flota aérea presidencial a las fuerzas armadas del país. Milei y su administración continúan viajando en aerolíneas comerciales para ahorrarle dinero a su gente".
Horas después del revuelo sobre un tema en el que Milei ya sentó posición desde que asumió el Gobierno, el Ministerio de Defensa salió a aclarar que no se trataba de una "donación".
Y un escueto comunicado, la cartera de Petri indicó que "la intención es realizar el traspaso de la flota de aviones a la Fuerza Aérea", por lo que "se siguen realizando las auditorías y los relevamientos pertinentes para continuar con el cumplimiento de la orden del Presidente de la Nación".
Agregaron que "si bien la flota ya es operada y mantenida por personal de la Fuerza Aérea, lo cierto es que hoy depende formalmente de la Secretaría General de Presidencia".
Por su parte, el vocero presidencial, Manuel Adorni emitió un tuit con contenido similar. Desde su campaña electoral, Milei despotricó contra el uso desmedido de los bienes del Estado y contra el avión que compró Alberto Fernández, que él nunca utilizó. Viaja en vuelos comerciales, en los que se saca fotos con los pasajeros y las difunde como parte de las virtudes que afirman promover los libertarios.
A su vez, en su discurso de apertura de sesiones ordinarias del Congreso, el viernes pasado, anunció que impulsará una iniciativa para que los funcionarios no puedan utilizar aviones sanitarios financiados por el Estado y volvió a expresarse sobre estos gastos.
Además del ARG 01, que es un Boeing 757 y el ARG 02, que es un Boeing 737, la flota presidencial se compone por un Leart 60 (ARG 03) que ya tenía la Fuerza Aérea- y tres helicópteros, el Black Hawk S70 (que es el ARG 10), el Sikorsky S 76, convertido en el ARG 11 y el otro Sikorsky S 76, que es el ARG 12.
Consultadas fuentes castrenses explicaron que la flota presidencial dependía hasta ahora de la agrupación Aviones, que estaba manejada por civiles, por el despedido Leonardo Barone -tras el arriesgado sobrevuelo del ARG01 sobre Aeroparque el año pasado-, y dependía de la Secretaría General de la Presidencia, que llevaba adelante Julio Vitobello (una suerte de secretario de Alberto Fernández), y actualmente está en manos de Karina Milei.
Siendo jefe de la Fuerza Aérea, el brigadier general Isaac logró que el manejo de los aviones, de los pilotos y mecánicos, fueran ya de Fuerza Aérea. Pero eso se hacía únicamente por requerimiento del Gobierno. Y como este año no hubo ningún requerimiento porque Milei y sus funcionarios no quieren utilizar por ahora los aviones presidenciales, en lugar de tenerlos parados, los cederá para que los opere la Fuerza Aérea y realice con ellos sus vuelos operativos.
Ello implica usar el helicóptero para trasladar tropas para adiestramiento de la Fuerza Aérea. Por eso ceden los aviones, lo cual no quita que si hay algún requerimiento para el Presidente o su comitiva en algún medio aéreo, esos aviones estén disponibles para ellos. ■