Clarín

La carrera por la Casa Blanca: Trump y Biden salen a la caza de los votos de Nikki Haley

La ex embajadora sale de la interna republican­a y deja al ex presidente como líder indiscutid­o del partido, quien ahora peleará sus votos con el demócrata.

- Paula Lugones plugones@clarin.com

Donald Trump arrasó en el “Supermarte­s” electoral y superó este miércoles el último escollo que le quedaba para pelear contra Joe Biden su regreso a la Casa Blanca: Nikki Haley, su rival en la primaria republican­a, se bajó de la campaña y el camino ahora le queda despejado al magnate para enfocarse en las elecciones generales del 5 de noviembre. Ambos candidatos ya se lanzaron a conquistar a los votantes de la ex embajadora ante las Naciones Unidas.

Trump ganó el martes con facilidad en 14 de los 15 estados donde se disputaron las primarias republican­as, mientras que Haley se impuso en solo uno, el progresist­a Vermont. Biden también triunfó en las primarias demócratas en todos los estados, donde competía tranquilam­ente casi sin rivales. Trump puede confirmar matemática­mente su candidatur­a presidenci­al el día 12 y Biden, con seguridad, el 19 de marzo.

Si bien el ex presidente ya acariciaba la nominación, la decisión de su ex embajadora y ex gobernador­a de Carolina del Sur le da un respiro y lo deja como líder indiscutid­o de su partido, aunque ahora debe trabajar para captar a los votantes antitrumpi­stas, porque ella, al declinar su candidatur­a, evitó darle el apoyo a Trump.

En una conferenci­a de prensa este miércoles por la mañana, Haley habló por primera vez desde conocidos los resultados. “Ha llegado el momento de suspender mi campaña (...) Ahora depende de Trump ganarse los votos de aquellos dentro y fuera de nuestro partido que no lo apoyaron. Y espero que lo haga”, dijo en Charleston, Carolina del Sur. “Nunca sigan simplement­e a la multitud, siempre tomen sus propias decisiones”, dijo Haley.

El electorado de esta mujer de 52 años, la primera en ganar dos estados en la historia del partido republican­o, es conservado­r pero más moderado, ligado al estilo tradiciona­l, globalista y reaganiano del Grand Old Party.

Tiene el voto de mayoría de mujeres, jóvenes y de perfil más educado, que contrasta claramente con el movimiento MAGA (Make America Great Again) de Trump, que tiene una base mayoritari­amente masculina, blanca (aunque va incorporan­do afroameric­anos y latinos) y de mayor edad, un perfil que ha copado el partido.

La carrera entre Trump y Biden para noviembre asoma ajustada, hoy con tendencia de dos puntos a favor del magnate, según el promedio de encuestas de RealClearP­olitics, aunque el republican­o lleva la delantera en varios estados clave. No extraña entonces que ambos candidatos hayan salido enseguida a intentar seducir a los votantes de Haley.

“Nikki Haley fue DERROTADA anoche, de manera récord, a pesar de que a los demócratas, por razones desconocid­as, se les permite votar en Vermont y en varias otras primarias republican­as”, publicó Trump en Truth Social este miércoles, minutos después de que Haley suspendier­a su campaña.

“Me gustaría agradecer a mi familia, amigos y al Gran Partido Republican­o por ayudarme a producir, por mucho, el Súper Martes más exitoso de la HISTORIA, y además me gustaría invitar a todos los partidario­s de Haley a unirse al movimiento más grande en la historia de nuestra nación”, agregó. “BIDEN ES EL ENEMIGO. ESTA DESTRUYEND­O NUESTRO PAIS”. Fiel a su estilo también le siguió pegando al decir que la campaña de Haley estuvo financiada “por demócratas radicales de izquierda, al igual que muchos de sus votantes” y dijo que esperaba que ella se sumara a su campaña.

Biden también busca el voto de la ex funcionari­a y lo anticipó sin rodeos. “Trump dejó en claro que no quiere seguidores de Nikki Haley. Quiero ser claro: hay un lugar para ellos en mi campaña”, dijo Biden en un comunicado. “Sé que hay muchas cosas en las que no estaremos de acuerdo. Pero en las cuestiones fundamenta­les como preservar la democracia estadounid­ense, defender el Estado de Derecho, tratarnos unos a otros con decencia, dignidad y respeto, preservar la OTAN y enfrentar a los adversario­s de Estados Unidos, espero y creo que podemos encontrar puntos en común”, sostuvo. En Estados Unidos tradiciona­lmente gana quien se impone entre el electorado moderado e independie­nte.

Le sucedió a Bill Clinton, a Barack Obama y a los propios Trump y Biden, que lograron conectar en su momento con ese sector. Pero el duelo de este año será sin elementos sorpresas: ya ambos tienen un mandato en sus espaldas y Trump no es el “outsider” showman que sedujo a la América profunda.

Además, pesan sobre él 91 cargos y cuatro causas penales por las que podría ser convicto: aunque en EE.UU un presidente puede gobernar desde la cárcel y a la base republican­a no le importa, una condena podría afectar la visión del electorado menos extremo.

Los votantes de Haley no quieren el caos, el desmanejo y la imprevisib­ilidad que Trump puede llevar otra vez a la Casa Blanca. Un sondeo de Quinnipiac reveló que, si bien una gran parte de los votantes republican­os y de tendencia republican­a de Haley respaldarí­an a Trump, el 37% votaría por Biden. ■

 ?? AFP ?? Victoria. Donald Trump logró un importante triunfo en la batalla más importante de su campaña y virtualmen­te ya es candidato.
AFP Victoria. Donald Trump logró un importante triunfo en la batalla más importante de su campaña y virtualmen­te ya es candidato.
 ?? ?? Caída. Ex embajadora Nikki Haley.
Caída. Ex embajadora Nikki Haley.

Newspapers in Spanish

Newspapers from Argentina