Francos busca ampliar las negociaciones en el Congreso
El ministro del Interior negocia por separado con mandatarios provinciales. Y en Diputados, con jefes de bloques cercanos al oficialismo.
En la previa de la reunión que mantuvo con 20 gobernadores y cuatro vicegobernadores el ministro del Interior Guillermo Francos recibió a Miguel Angel Pichetto en su despacho en la Casa Rosada. El titular del bloque Hacemos Coalición Federal llegó solo a la Rosada y se retiró poco después del mediodía.
El diputado por Río Negro había estado ausente en la sugerente reunión que mantuvieron el jueves por la tarde Francos, el titular de la Cámara Baja Martín Menem, Santiago Caputo y los jefes de bloque de la UCR Rodrigo de Loredo y del PRO, Cristian Ritondo y que sirvió como antesala de la cumbre de gobernadores en el Salón Eva Perón de la Casa Rosada.
El motivo fue el mismo: discutir el contenido de la nueva ley ómnibus y la incorporación del capítulo fiscal, que ya no incluirá aumento de retenciones.
Para conseguir apoyos, el Gobierno busca puntos de encuentros más allá del bloque PRO. En el oficialismo están seguros de que contarán en cualquier escenario con lo votos del bloque que preside Ritondo y que acompañó de manera cerrada la votación geregulación neral y particular de la ley ómnibus. El ex ministro de Seguridad bonaerense almorzó a solas con Javier Milei después de que el Presidente explicitará su intención de fusionar al bloque macrista y al de LLA en el Congreso, que finalmente quedó postergada.
Hacemos Coalición Federal reúne a 23 diputados, pero como quedó demostrado en la primera votación de ley Bases Pichetto (electo en la boleta de JxC) difícilmente pueda hacer confluir las opiniones disímiles de los integrantes de su bloque donde conviven legisladores de la Coalición Cívica, peronistas federales, Margarita Stolbizer, Ricardo López Murphy y Emilio Monzó.
Al presidente del bloque radical le pasó algo parecido. Solo Facundo Manes y Pablo Juliano rechazaron de plano la ley ómnibus, pero muchos más de sus correligionarios rechazaron los pocos artículos que se alcanzaron a votar hasta que el jefe de bloque oficialista Oscar Zago mandó la ley de regreso a comisión.
Ni Francos ni ningún otro interlocutor del oficialismo sondeó a los jefes de bloque del peronismo y de la izquierda. El Gobierno no cree poder encontrar allí más voluntades que las que aporten las negociaciones con los gobernadores, que corren por un carril separado.
El oficialismo busca asegurarse los votos claves para las reformas más importantes que quiere sancionar en el Congreso después del fracaso de la ley de Bases que las contenía: los cambios cálculo previsional, la reforma laboral, la deshidrocarburífera y de minería, un régimen especial para grandes inversiones, la esencialidad de la Educación y la delegación de facultades al Presidente y el avance de privatizaciones.
El Gobierno quiere avanzar con la restitución del Impuesto a las Ganancias para los asalariados para compensar a las provincias, que -con la excepción de la colaborativa Tucumán- ya no reciben Adelantos del Tesoro Nacional.
En el Ejecutivo hacen cuentas y toman nota de que hay varios mandatarios provinciales que se manifestaron a favor de la reinstalación de la cuarta categoría del impuesto, por el peso que tiene en sus cuentas públicas y porque afectaría a pocos contribuyentes de sus respectivas provincias.
Los gobernadores de La Patagonia manifestaron el jueves en la cumbre de Puerto Madryn que también se oponen a esa solución en un escenario de alta inflación. La discusión de fondo también es quién asumirá el costo político frente a un millón de argentinos que volverían a pagar el impuesto.
En sus conversaciones con Economía, también los técnicos del FMI reclamaron que se revierta la eliminación de Ganancias para los asalariados que impulsó Sergio Massa el año pasado.w