Otro susto con Falcioni, que se sintió mal en la práctica y fue internado
El entrenador, que se recuperó de un cáncer, terminó siendo trasladado de urgencia al sanatorio Finochietto.
El director técnico de Banfield, Julio César Falcioni, fue internado ayer de urgencia en el sanatorio Finochietto luego de haberse sentido mal minutos antes del entrenamiento con miras al partido del lunes ante Vélez, como local, correspondiente a la 10° fecha de la Copa de la Liga Profesional.
Falcioni, que regresó al club en mayo del año pasado, sintió un hormigueo en uno de sus brazos y, alertado por la situación, le contó a los médicos del cuerpo técnico. Fue antes de la práctica matutina en el predio de Luis Guillón, donde el Taladro preparaba su próximo compromiso luego del 3-0 conseguido como visitante ante Atlético Tucumán. Inmediatamente, y para quedarse tranquilos, el DT y los doctores decidieron ir al sanatorio porteño para que se realizara una serie de controles.
“Se sintió mal en la práctica y el doctor lo llevó a la clínica. Está bien controlado”, informaron desde el círculo cercano al entrenador, que julio próximo cumplirá 68 años.
Si bien todos los exámenes salieron bien, los médicos del sanatorio le recomendaron que quedara en observación. Y se decidió, por protocolo, que permaneciera internado, en principio, hasta hasta hoy. La idea es volver a evaluarlo y, en caso de que todo siga bien, podrá tener el alta. Mientras tanto, Néstor Píccoli y Julio Barraza, sus ayudantes más cercanos, se harán cargo del primer equipo de Banfield.
El ex DT de Boca e Independiente entre otros clubes, y con una extensa trayectoria como futbolista desempeñándose como arquero, sabe bien lo que es enfrentar un problema de salud. Años atrás le había tocado superar un cáncer de laringe que lo obligó a atravesar 35 sesiones de quimioterapia, dos semanas en terapia intensiva y una cirugía maratónica de 13 horas que le quemó las cuerdas vocales dejándole una disfonía que no le impidió seguir trabajando en el fútbol, la gran pasión de su vida.
“Lo que me pasó a mí es que el cáncer estaba oculto y yo no tenía ningún síntoma. Fui a ver al otorrinolaringólogo porque estaba disfónico, pero no era nada raro para mí porque generalmente me ponía así. Me dio un antibiótico y listo. Cuando no se me pasó con el antibiótico me mandó a hacer un estudio y ahí vieron los nódulos. Pero no se veía la enfermedad que estaba detrás”, le contó a Clarín en agosto de 2019 cuando ya había dejado atrás la enfermedad. Y profundizó: “Cuando tenés cáncer el miedo es ese: no poder volver hacer una vida normal; no quería quedar discapacitado en el departamento. Y yo por suerte nunca estuve así...”
recuperado y mientras estaba al frente de Independiente, otro club en el que tuvo varios ciclos como DT, Falcioni sufrió el golpe de la muerte de su mujer, Palka Ada Adela, quien también batalló contra el cáncer y complicó su cuadro tras contagiarse de coronavirus.
Resiliente, nunca dejó de trabajar y en mayo retornó a Banfield. Sin embargo, la salud le volvió a jugar una mala pasada en junio cuando debió reingresar a una clínica por una apendicitis que lo hizo pasar por el quirófano.w