El chavismo prohibió a la líder opositora Corina Machado inscribirse para las elecciones
La página del Consejo Nacional Electoral advierte que la candidata “presenta una prohibición para ejercer cargos”. Las presidenciales son el 28 de julio y Nicolás Maduro ira por la reelección.
El Consejo Nacional Electoral (CNE), dominado por el régimen chavista, de manera oficial en su página web le cierra la puerta a María Corina Machado para inscribir su candidatura unitaria de la oposición venezolana y poder competir en las elecciones presidenciales adelantadas del 28 de julio en Venezuela.
Según el calendario electoral anunciado la semana pasada, la inscripción de los candidatos deberá realizarse entre el 21 y 25 de marzo. La medida de prohibición es un duro golpe para la candidata de la oposición, cuyo liderazgo y furor en las calles crece como la espuma y profundiza la incertidumbre sobre qué ocurrirá en las próximas semanas.
A pie de página del Registro Electoral Permanente del CNE, en los datos de María Corina Machado, aparece una categórica nota que dice: “Este lector (a) presenta una prohibición para ejercer cargos o función pública, de acuerdo a lo establecido en la normativa constitucional y legal vigente”. Se puede acceder a la página con el número de documento de identidad de la persona. La inhabilitación de Machado para ejercer cargos públicos por 15 años fue dictada arbitrariamente por la Contraloría General en julio del año pasado y ratificada por el Tribunal Supremo de Justicia en enero, en un país en el que todos los poderes están controladas por el régimen chavista.
“Si el régimen toma la decisión, como lo estamos viendo en la página del CNE, de que María Corina está inhabilitada, entonces está inhabilitando a la decisión de un país que se pronunció el 22 de octubre de 2023 y que tiene una candidata legitimada por un proceso de primaria”, dijo Magalli Meda, jefa de campaña del comando de Machado. Además, destacó que la decisión “no es más que una demostración de lo que tenemos mucho tiempo viendo, que es la negación del régimen de ir a un proceso de elección limpio en el que país confié y crea”. Pese al veto, la líder liberal Corina Machado, que es la candidata presidencial favorita de las encuestas (sus números triplican a los de Nicolás Maduro), elegida en las primarias de la oposición el pasado 22 de octubre cuando arrasó con el 92% de los votos, descartó la semana pasada la posibilidad de elegir a otra persona que la sustituya debido a la inhabilitación, que considera inconstitucional.
“Óiganme bien, aquellos que están hablando de sustituto, les tengo una sorpresa. Sí, aquí sí hay un sustituto, el que va a sustituir a (el presidente) Nicolás Maduro que soy yo”, dijo entonces frente a decenas de simpatizantes en el estado Barinas, la tierra natal del ex presidente y antecesor de Maduro, Hugo Chávez.
María Corina sostiene que ella tiene un mandato que cumplir con los que votaron por ella en las primarias: derrotar a Maduro. Pide también una fuerte reacción internacional contra el veto de su candidatura.
Ante el incumplimiento de los Acuerdos de Barbados y la inhabilitación de María Corina, el gobierno de los Estados Unidos decidió reanudar las sanciones económicas y petroleras contra el régimen chavista que se harán efectivas en abril. De hecho anuló la licencia para la comercialización del oro venezolano, la empresa Minerven, el mes pasado. Para su inscripción en el CNE, la candidata opositora ha convocado actos masivos de acompañamiento en los 23 centros electorales del CNE regionales y en las principales capitales del mundo, posiblemente el 21 de marzo. Es todo un desafío.
Por su lado, Nicolás Maduro, que busca su tercera reelección, ya sabe que el partido gobernante Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) lo postulará como su candidato antes del 15 de marzo para las elecciones del 28 de julio.
En una rueda de prensa, el diputado y considerado número dos del chavismo, Diosdado Cabello, explicó que las organizaciones de base del partido celebraron 317.187 asambleas durante el fin de semana, en las que los ciudadanos “levantaron su mano y postularon” a Maduro -en el poder desde 2013- a la contienda, por un sexenio más.
Maduro -que ganó su primera reelección en 2018 con 6,2 millones de votos, en unos comicios cues
Nicolás Maduro llegó al poder en 2013 tras la muerte de Chávez.
tionados por la comunidad internacionalagradeció el domingo el apoyo expresado por sus simpatizantes en estas asambleas, algunas de las cuales fueron transmitidas por los medios estatales.
El régimen chavista adelantó el cronograma electoral de cuatro meses, violando las leyes nacionales que establecen como mínimo seis meses de preparación.
Para hacerse unas elecciones a su medida, Maduro ha permitido la inscripción de más de 20 aspirantes que no le hacen sombra ni competencia. Ha inhabilitado a los principales candidatos opositores como María Corina y Henrique Capriles y ha recrudecido la represión contra los opositores. Tampoco ha liberado a los 270 presos políticos.
Por supuestos actos conspirativos, las autoridades de Venezuela habían detenido hasta finales de enero a 36 ciudadanos, entre ellos tres directores de campaña de Machado y la activista de derechos humanos Rocío San Miguel.
Un cuarto dirigente de campaña de Machado fue detenido el sábado en la madrugada, acusado también de conspiración.