Dura crítica de un ex canciller británico contra el magnate
Después de las declaraciones del candidato presidencial Donald Trump de que el no entregará ayuda a Ucrania para continuar la guerra si gana la elección presidencial en noviembre y la decisión de Vladimir Putin de estar dispuesto a la guerra nuclear, la seguridad de los europeos ha quedado en manos de la UE y sus potencias atómicas.
Francia y Gran Bretaña deben preparar sus arsenales y sus ejércitos para un conflicto. Aumentar sus presupuestos militares exhaustos y ver como reemplazan en ese contexto a EE.UU. si Trump gana la elección, para garantizar la suerte de la Unión Europea.
“Donald Trump ha hecho del lunes 11 de marzo un día que será recordado como vergonzoso. Su declaración de que si llegaba a la presidencia Ucrania no recibiría ni un centavo más en ayuda fue tan peligrosa como tonta. Era exactamente lo que Putin anhelaba oír. Ya no necesita dar por sentado que tendría que hacer concesiones reales, como lo haría Volodimir Zelenski, si se quiere poner fin a la guerra mediante negociaciones” explicó este Malcom Rifkind, ex canciller conservador británico.
Rifkind es uno de los analistas internacionales más prestigiosos de los Tories y negoció directamente con Moscú durante su cargo.
“Gracias a la irresponsabilidad de Trump, Zelenski estaría negociando desde una posición de debilidad”, alertó el político británico. “El dictador de Rusia exigiría no sólo el territorio ucraniano que ha ocupado ilegalmente”. También exigiría que Ucrania renuncie a su independencia y se convirtiera en vasallo permanente de Rusia, como parte de su “esfera de influencia” pronosticó.
Las amenazas de Trump “serán estudiadas de cerca en Beijing, Tokio y Taiwán, así como en Kiev. Xi Jinping se sentirá alentado porque si los EE.UU. bajo Trump abandonan no solo a Ucrania sino también el liderazgo de la OTAN y Occidente, su compromiso de proteger la libertad de Taiwán y el territorio de Japón y Corea del Sur se vería gravemente socavado” dijo Rifkind.
“El Reino Unido, Alemania y Francia ahora deben aceptar que Estados Unidos bajo Trump podría dejar de ser un aliado confiable y un garante de la seguridad de Europa”, alertó el ex canciller británico.
“No es sólo Ucrania la que está siendo amenazada por Trump sino Europa en su conjunto. Los países de la OTAN deben comenzar una expansión y modernización fundamental de nuestras capacidades de defensa durante los próximos cinco años para hacer frente a un régimen hostil y agresivo de Putin”, dijo.
“Tanto el gobierno como el Partido Laborista deberían aceptar la necesidad de un rápido y sustancial aumento del gasto en defensa del Reino Unido hasta el 3% de nuestro PBI, con aumentos similares en Alemania y Francia. Europa es mucho más rica que Rusia y puede afrontar este desafío, si tiene la voluntad de hacerlo. También necesitamos utilizar la nueva membresía de Suecia y Finlandia en la OTAN para ayudar a proteger a los Estados bálticos.