En busca del borrón y la cuenta nueva
Un hombre aprovecha el atentado a la AMIA para que lo crean muerto.
“Descansar en paz”
Drama. Argentina, 2024. 106’, SAM 13 R. De: Sebastián Borensztein.
Con: Joaquín Furriel, Griselda Siciliani, Gabriel Goity, Lali González.
Salas: Atlas (Alcorta, Caballito, Patio Bullrich, Flores, Nordelta), Cine Arte Cacodelphia.
A quién no se la ha cruzado por la cabeza la idea de comenzar una nueva vida, desde cero. Es probable que no como le sucede a Sergio Dayan (Joaquín Furriel), quien acusado por una deuda impagable se va al Paraguay dejando a su familia sin aviso.
La nueva película de Sebastián Borensztein transcurre en fechas cercanas al atentado a la AMIA. Sergio pasaba por ahí, y ve una solución a sus problemas: desaparece con el convencimiento o la certeza de que lo darán por muerto (aunque no encuentren su cadáver) y, como decíamos arriba, arrancará de cero.
Con la excepción de Kóblic, Borensztein se había dedicado a ponerles buenas cuotas de humor a sus películas (La suerte está echada, La odisea de los giles, Un cuento chino). En Descansar en paz no hay sonrisas, no hay risas, no hay razones para la alegría.
Sergio estaba casado con Estela (Griselda Siciliani), con quien tenía dos hijos, Mati y Florencia. Y si decíamos que no había motivos para la felicidad, Sergio no puede distenderse ni siquiera en el bat mitzvá de Flor. Hay alguien que no fue invitado a la celebración, y suena a amenaza.
El problema de Sergio es que accedió a una serie de préstamos para poder mantener la fábrica familiar, que le otorgó Hugo Brenner (Gabriel Goity), un usurero que lo aprieta para que cobrar, o acabará con su familia.
Y bueno, ante tales circunstancias, ese maldito 18 de julio de 1994 le sirve de escape a Sergio, quien sufre el atentado, aparece entre los escombros, pero tras ser atendido en la misma calle Pasteur, decide poner rumbo a Paraguay sin avisar a nadie.
La trama se complica cuando Estela va a ver a Brenner -que perdió un familiar en el atentado terrorista-, él le condona la deuda… Y empieza una relación sentimental entre los dos.
Basándose en la novela de Martín Baintrum, Borensztein va y viene entre Buenos Aires y Paraguay, donde Sergio se las arregla trabajando en lo que puede.
Tanto Furriel como Goity fueron premiados en el Festival de Málaga como mejor actor protagónico y de reparto. Y se nota la mano de Borensztein en el manejo de las interpretaciones. No está en pantalla Ricardo Darín, como en varias de sus películas, pero sí figura como productor.
Descansar en paz es un thriller con toques de drama familiar. El trabajo es preponderante para el protagonista, al que dedica su vida tanto como a su familia. La elección de los planos cerrados sobre Sergio permite advertir el agobio que sufre, gracias también a la interpretación de Furriel.
El desenlace de la película es tal vez un poco remanido o trillado, pero no le resta mérito.