Sinner fue de la solidaridad al pelotazo a su fisio y la victoria

Jannik Sinner sumó una nueva victoria, la 19° en 20 partidos disputados en el año, al vencer al australiano Christopher O’Connell por 6-4 y 6-3 en una hora y 51 minutos de juego y se clasificó para los cuartos de final del Masters 1000 de Miami. Su próximo rival será el checo Tomas Machac, la gran revelación del torneo.

Fue un partido parejo, más allá de que el resultado final pueda hacer pensar que Sinner estuvo cómodo. Para nada. Y así lo reflejó post partido. “El empezó muy bien, yo cometí algunos errores y se me hizo difícil arrancar quiebre abajo también desde lo mental. Después me pude mantener sólido, creé mis chances y él falló en momentos importantes. Ahí estuvo la clave”, sostuvo.

Hizo calor en Miami y no sólo lo sufrieron los jugadores sino también el público en las tribunas del Grandstand, donde una persona se descompensó en pleno partido. Sinner, en ese momento, le ofreció agua para que pudiera sobrellevar una situación que afortunadamente no pasó a mayores.

Luego el tenis continuó y el tercero en el ranking impuso su jerarquía. Superó ese primer momento de asedio de su rival y después se sintió más a gusto con su juego y cómodo con el desarrollo del partido. Fue tan así que hasta se dio un momento gracioso con su equipo. Es que en una situación desafortunada, ya en el segundo set, golpeó involuntariamente con un pelotazo a su fisioterapeuta en los testículos. “Le pegué con el marco y la pelota fue directamente a él en un lugar importante para su humanidad. Le pedí disculpas. Por suerte se encuentra bien”, dijo, entre risas.

Así sigue Miami para Sinner. Jugó dos finales -en 2021 con Hubert Hurkacz y el año pasado frente a Daniil Medvedev- y quiere que 2024 sea el año del título.