La tragedia que para un ministro fue una gesta
Para verlo entero habrá que esperar a su estreno el 17 de abril, pero el tráiler de “Pandemia, gestionar lo desconocido”, documental dirigido y producido por el ministro de Salud bonaerense, Nicolás Kreplak, ya deja en claro cuál es el tono de la obra: la conmemoración de una epopeya.
Casi exactamente cuatro años después de la implantación de la cuarentena, decretada por Alberto Fernández el 20 de marzo de 2020, el avance de la películacomienza con una frase de Axel Kicillof. “Conservo la memoria física de la situación esta. La sensación, tal vez de una película de Hollywood, de esos que están en la playa y ven que se viene el tsunami”, dice el gobernador, en una llamativa analogía. Quizás se vea como el héroe que siempre tienen esas historias.
El video dura poco más de minuto y medio y tras Kicillof, una toma de aquellos días del propio Kreplak remarca su clarividencia para anticipar la gravedad del coronavirus: “Se nos va a desbordar, probablemente jodido, porque todos los países del mundo se desbordaron. Preparémonos para el peor de los escenarios posibles”, sostiene, cataclísmico.
Luego se mencionan el cierre de las escuelas, las manifestaciones “sin consigna clara” contra la cuarentena y el duro trabajo que enfrentó el personal de la salud.
Aparece también el entonces ministro de Salud provincial, Daniel Gollan, quien recuerda los vuelos que Aerolíneas Argentinas enviaba a Rusia para traer la vacuna Sputnik. “Todo tenía que funcionar perfectamente, porque si no te fletaban el avión sin las cosas”, dice el hoy diputado.
“Nosotros tenemos que contagiar, de arriba para abajo, la responsabilidad de que nosotros vamos a gestionar esto como sea”, cierra el tráiler Kreplak, en versión 2020.
Esa arenga, el “vamos a gestionar esto comantener mo sea”, como el resto del clip, tiene un regusto a gesta. Como si cada una de esas cosas luego hubieran sido resueltas con excelencia. Como si no hubiera sobrevenido una catástrofe potenciada por una cantidad enorme de medidas erróneas y trágicas cuyas consecuencias persisten hoy.
De los 130.000 muertos por coronavirus, 60.000 fueron bonaerenses.
No hace falta googlear para tener recuerdos de la época, todavía frescos y dolorosos. El empecinamiento con una cuarentena decretada antes de tiempo, las primeras olas de contagio en el GBA porque la gente no daba más encerrada y necesitaba trabajar, la defensa de la Sputnik en desmedro de la Pfizer o la Moderna con insólitos argumentos geopolíticos, la terquedad en las escuelas cerradas, el vacunatorio VIP, la fiesta de Olivos…
A mayo pasado, cuando terminó la emergencia declarada por la Organización Mundial de la Salud, de los más de 10 millones de casos de coronavirus registrados en el país, 3.881.385 correspondían a la provincia de Buenos Aires. De los 130.000 muertos que nos dejó el Covid, 60.676 eran bonaerenses.
La película es presentada por la Fundación Soberanía Sanitaria, que en un posteo que anuncia el estreno, anticipó: “Para que todos y todas puedan ver el enorme trabajo, esfuerzo y dedicación de todo el equipo de Salud que durante día y noche no paró para que el sistema de salud cumpla su rol y cuide a cada bonaerense”.
Si no fuera tan hiriente, podría pasar por cargada.
Desastrosos fracasos vendidos como victorias.
Otra vez.w