Las fugas de presos de dos comisarías porteñas superpobladas renuevan el reclamo de la Ciudad a la Nación
El domingo se escaparon 9 de la sede de Perú al 1000. Ayer, huyeron dos de una seccional de Balvanera. Jorge Macri insistió con que el Servicio Penitenciario debe llevárselos a cárceles.
Otra vez en comisarías porteñas. Otra vez fugas, la mayoría detenidos por robo. De nuevo, la sobrepoblación de presos en la Ciudad bajo la lupa. El domingo por la noche 15 presos intentaron escapar de la Alcaidía N° 1 de San Telmo, en Perú al 1000. Nueve lo lograron. Ayer por la tarde, dos se escaparon de una seccional en Balvanera.
Los policías que estaban a cargo de la custodia lograron retener a seis. Luego recapturaron a dos, al resto no los encontraron. Tampoco se volvió a encontrar todavía a los dos que se escaparon ayer.
En San Telmo, todo empezó cerca de las 21, cuando 15 personas detenidas en la alcaidía decidieron escaparse. Está a 150 metros del Mercado de San Telmo, en una de la zonas turísticas más importantes de Buenos Aires.
En esta dependencia, habilitada para alojar 12 personas de manera temporaria, había 20 presos, varios con prisión preventiva.
El barrio vivió algunas horas de tensión, con un helicóptero sobrevolando la zona y calles cortadas.
Entre los evadidos había un detenido por hurto, otro por intento de robo, cuatro por robo (con prisión preventiva) y uno por averiguación de ilícito.
Fuentes policiales contaron que los custodios de la dependencia escucharon "ruidos extraños" en una de las celdas y, cuando fueron a inspeccionarla, sólo había cinco presos. La alcaidía, justificaron en el Gobierno porteño, estaba "sobrepasada" en capacidad a un 100%.
"Los agentes de la División Unidad Táctica de Intervención de Alcaldías y personal de Comisarías Vecinales 1 B, 1 C y 1 F llevan adelante la búsqueda a pie, con móviles policiales, y por aire con un helicóptero que sobrevoló el barrio de San Telmo y zonas aledañas", difundieron sobre el operativo.
En Balvanera, el hecho sucedió en la Alcaidía 3A, que queda en Lavalle al 2600. Luego de una requisa se estableció que dos detenidos habrían violentado una reja del calabozo (que funcionaba anteriormente como vestuario).
Uno de los evadidos se encuentra imputado en una causa por robo, y el otro posee un pedido de captura vigente, por el mismo delito. Se habrían fugado por el patio interno de la alcaidía,
La Ciudad enfrenta una crisis carcelaria cada vez más profunda. El número de detenciones no para de crecer y, según reconocen en el gobierno, la cantidad de presos pasó de 1.800 a 2.005 en tres meses.
Los presos porteños están en manos del Servicio Penitenciario Federal (SPF) y de la Justicia Nacional porque muchos delitos no han migrado a la órbita de la Ciudad y porque no tienen penales propios.
Desde el SPF, que ahora depende de la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, hacen malabares con cupos escasos.
Pero mientras aumentan las detenciones, no crecen las unidades carcelarias. "Hoy tenemos más de 2.000 detenidos en comisarías y alcaidías, 400 de ellos cumpliendo condena efectiva", informaron fuentes de la Ciudad.
En la Ciudad hay 70 comisarías y 34 alcaidías: 13 son edificios anexos. La capacidad permitida es de 798 para las alcaidías y 243 para comisarías. Todas funcionan a más del doble de su capacidad.
Además de las fugas, que se han convertido en una situación recurrente para el Gobierno porteño, la situación de encierro escapa de lo que corresponde de acuerdo a los estándares internacionales y de la legislación argentina. El desborde genera condiciones de hacinamiento para los detenidos. En muchos casos no tienen colchones, camas, espacios para comer o higienizarse, mucho menos para recibir visitas.
El jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, le reclamó al Gobierno del presidente Javier Milei el traslado de presos al SPF. “Las comisarías porteñas no están preparadas para la cantidad de detenidos que tenemos, necesitamos que el Gobierno Nacional se los lleve al SPF", afirmó en diálogo con radio Continental. Y agregó que el 94% de los detenidos son de la Justicia Nacional o Federal, por lo tanto "no son competencia de la Ciudad".
Además, el ministro de Seguridad porteño, Waldo Wolf, aseguró a TN: “Tenemos una relación muy fluida con el gobierno actual, estamos trabajando en descomprimir esta situación que hoy tiene un agravante: nosotros estamos deteniendo más gente. Asumimos con 1.800 detenidos, hoy tenemos 2.005”.