Para que la inflación llegue a un dígito los alimentos son clave

La desaceleración del precio de los productos de consumo masivo servirá para contrarrestar la suba de los servicios en abril. Los pronósticos privados.

El Indice de Precios al Consumidor del 11% en marzo, con la inflación núcleo en 9,4%, abre el camino para que abril se convierta en el mes en el que el registro sea de un dígito.

En el relevamiento de Expectativas de Mercado del Banco Central, las consultoras, que habían marcado 12,5% para marzo pronosticaron 10,8% en abril y 9% en mayo.

Pero a la luz del último informe del INDEC, algunos analistas empiezan a rever sus proyecciones y ven posible que se llegue a un dígito en abril.

Con el dólar como ancla, la inflación viene bajando mes a mes desde enero. Pero las fuertes subas de los servicios públicos en abril amenazan con quebrar esa tendencia.

Los aumentos en el gas oscilan entre el 250% y el 500% en todo el país. En el caso de la electricidad, los incrementos varían entre el 120% y el 300%.

Sin embargo, la desaceleración de los alimentos puede compensar el alza de las tarifas. En marzo el rubro alimentos subió 10,5% por debajo del 11,9% de febrero. Y esa tendencia a la baja se profundizaría en abril.

Desde la Fundación Libertad y Progreso marcan que el relevamiento de para la primera semana de abril mostró que el índice de precios minoristas creció un 10,2% mensual. “En base a estos datos, proyectamos que abril cerrará con una suba mensual del 9,5%; incluso ante el impacto de la suba de las tarifas. Esto porque el impacto de actualización de los precios regulados se ve compensando con una fuerte desaceleración de los no regulados, que ya en marzo viajaron a un ritmo mensual de un dígito y que en abril podrían subir en torno al 6%-7%”, señaló Eugenio Marí, Economista Jefe de la Fundación.

Los datos del relevamiento de precios minoristas de la consultora C&T para la región GBA muestran “un fuerte impacto de los ajustes en gas y el servicio de agua pero una importante moderación en la gran mayoría del resto los rubros,

incluidos alimentos y bebidas, que son clave en la inflación núcleo. Por ello, la inflación total del mes podría llegar a ubicarse en un dígito”, anticipan.

En la medición de la consultora EcoGo, el relevamiento de precios de alimentos marcó una inflación del 0,4% en la primera semana de abril, 0,4 puntos porcentuales más baja que la semana previa.

La misma tendencia registra la consultora LCG, que en su índice de precios de alimentos registra 0,4% en la primera semana de abril y 0,2% en la segunda. Se trata del índice semanal más bajo de los últimos 9 meses.

“Abril comenzó marcando una nueva desaceleración en el relevamiento de precios de alimentos de LCG, acumulando en dos semanas una inflación del 0,6%. En abril la estacionalidad suele jugar a favor, sobre el que, además el BCRA continua con un crawling del 2% en el tipo de cambio oficial”, señala LCG.

“En este relevamiento semanal, la inflación de alimentos venía promediando un 11-12% mensual, pero se derrumbó a los valores de junio de 2023 (6,2% promedio a la segunda semana de abril). El porcentaje de productos con aumentos se mantiene elevado (25%). Sin embargo, tenemos que esperar a ver los efectos de las segundas vueltas de los aumentos de regulados y el aumento de gas que se sentirán en el mes”, advierten.

Para el Centro de Estudios Económicos de Bahía Blanca en la primera semana de abril el rubro alimentos y bebidas registró una variación de 2%. Contra la semana previa, los productos que más subieron fueron la papa con el 18,5%, el agua con 10,3% y el arroz con 10,1%. A la vez hubo bajas del 5% en las naranjas, 6% en café y 6,9% en manteca.

Según el relevamiento de precios de Econviews, que mide una canasta de alimentos, limpieza y perfumería en los supermercados, el mes comenzó con una variación semanal de 0,8%. En la primera semana de marzo el alza había sido de 2,2%.

El economista Fernando Marull, director de la consultora FMyA, dice que “abril sería el último mes de fuertes aumentos de tarifas, ya que se confirmaron finalmente las subas de gas del orden de 350% promedio para residenciales. Esto aportaría casi 2 puntos a la inflación general, que proyectamos en 11% mensual. En el caso particular de Alimentos seguirá debajo del 10%”, apunta Marull.

El freno de los alimentos se da en sintonía con el derrumbe del consumo. Según los datos de CAME en marzo las ventas minoristas bajaron 12,6% anual frente al mismo mes del año pasado, a precios constantes, y acumulan una caída de 22,1% en el primer trimestre del año. En la comparación mensual, disminuyeron 3,2%. ■

La canasta de primera necesidad arrancó en abril con una variación semanal de 0,8%. En marzo el alza había sido de 2,2%”.

Abril sería el último mes de fuertes aumentos de tarifas, que aportarían casi 2 puntos a la inflación general”.