-Estuviste cuatro años en Lanús. ¿Te dolió todo lo que pasó en el último encuentro?
-Se malinterpretó por la arenga, que fue para mis jugadores y para mi equipo. No fue contra nadie. Lanús es un club en el que dejé muchos amigos, un club que reconozco todo el tiempo y a los hinchas siempre les agradezco el haberme abierto las puertas de su casa. El cariño es mutuo. Me extrañó algún comentario, pero tengo un gran reconocimiento por el club y por su gente.