Deutsche Welle (Spanish edition)
Informe exhaustivo sobre médicos culpables de atrocidades nazis
"A menudo sorprende cuán limitado es el conocimiento de la comunidad médica actual sobre los crímenes médicos de los nazis, a excepción quizás de una vaga idea sobre los experimentos de Josef Mengele en Auschwitz", afirma Herwig Czech, de la Universidad de Medicina de Viena.
Por este motivo, hace tres años, Czech y sus colegas propusieron al editor jefe de la revista especializada "The Lancet" crear una comisión para ampliar dichos conocimientos y sacar conclusiones para el futuro.
Informe detallado
Dicho informe es muy exhaustivo y ya está disponible. Los investigadores no sólo han recopilado evidencias históricas sobre atrocidades médicas durante el nacionalsocialismo, sino que también muestran muy claramente que estas atrocidades no fueron cometidas únicamente por unos pocos individuos y que algunas atrocidades repercuten hasta la actualidad.
El informe describe en detalle cómo médicos y expertos en salud ayudaron a redactar las llamadas "leyes de esterilización obligatoria" y participaron activamente en la esterilización de más de 350.000 personas, clasificadas como "genéticamente inferiores", según las leyes raciales nazis.
Muchas personas que fueron esterilizadas sufrieron posteriormente graves problemas físicos y psicológicos. Muchas fallecieron a causa de la intervención médica. Al menos 230.000 personas con discapacidades mentales, cognitivas y físicas fueron asesinadas en los llamados "programas de eutanasia" en Alemania y territorios ocupados durante la Segunda Guerra Mundial. Decenas de miles de personas sufrieron abusos como objetos de experimentación médica en campos de concentración.
La eugenesia como justificación
La doctrina racial nacionalsocialista sirvió como justificación pseudocientífica para llevar a cabo estas atrocidades. La base de esta "higiene racial” fue la eugenesia o "buen origen”, la teoría de los supuestos buenos factores genéticos. La eugenesia se basa en la teoría de la evolución, que publicó el naturalista británico Charles Darwin a mediados del siglo XIX: en un proceso de selección natural sólo sobreviven los
más aptos, mientras que los demás desaparen. Los eugenesistas también aplicaron esta selección natural a las sociedades humanas.
Dificultades económicas y sociales
En Alemania y otros países, la eugenesia se convirtió en una ciencia socialmente aceptable, y provocó un sufrimiento inconmensurable.
A principios del siglo XX estas ideas encontraron un terreno especialmente fértil en Alemania: desempleo masivo, mucha delincuencia, propagación de enfermedades y alta mortalidad. Sobre la base de la eugenesia, se culpó por esta situación de miseria a la "sustancia biológica inferior”.
Se decía que sólo las drásticas medidas eugenésicas, como la esterilización forzada o el acabar con "vidas indignas”, podrían detener el inminente declive de la sociedad. Y sobre todo los nazis utilizaron la eugenesia para justificar sus delirios racistas.
Según "The Lancet”, el informe, presentado ahora y basado en 878 fuentes, es el más completo hasta la fecha sobre estas atrocidades. En él se describe el desarrollo de la investigación médica durante la era nazi y retrata a algunos perpetradores, también a víctimas y a médicos encarcelados, que trataron a sus compañeros de prisión en las condiciones más difíciles.
Huellas hasta el presente
A pesar de una intensa investigación, muchos perpetradores y cómplices no pagaron por sus acciones después de la guerra o lo hicieron muy tarde. Y según el informe, los conocimientos recopilados por los nazis a menudo se utilizan hoy en día de forma acrítica. Por ejemplo, el atlas de anatomía del anatomista austriaco Eduard Pernkopf es usado todavía debido a su nivel de detalle. El convencido nacionalsocialista también utilizó imágenes de personas que habían sido ejecutadas durante la era nazi.
Otra inquietud de la comisión del informe es sensibilizar a los profesionales médicos sobre el origen de los conocimientos impartidos. "Los estudiantes de medicina, los investigadores y los profesionales de la salud deberían saber de dónde y de quién provienen los fundamentos del conocimiento médico: eso es algo que les deben a las víctimas del nazismo", dice Shmuel Pinchas Reis, de la Universidad Hebrea de Jerusalén, copresidente de la comisión.
Lecciones para el futuro
Para los autores del informe este es solo un primer paso. Ya están planeando realizar una extensa documentación en línea. "Las atrocidades médicas nazis se hallan entre los ejemplos más extremos y mejor documentados de participación médica en abusos de derechos humanos en la historia", dijo Sabine Hildebrandt, de la Escuela de Medicina de Harvard, en Boston, copresidenta de la comisión.
"Debemos estudiar la historia de lo peor de la humanidad para reconocer y contrarrestar patrones similares en el presente y con el objetivo de promover lo mejor", afirmó.
(rmr/er)
Küppers-Adebisi.
Discursos acordes con los tiempos
El concurso se anunció en alemán, inglés, francés, español y swahili y obtuvo una gran respuesta: en total se inscribieron online 671 artistas, el 30 por ciento de los cuales procedían del continente africano. 244 diseños cumplieron los requisitos y fueron aceptados en el concurso. En septiembre, el jurado compuesto por ocho miembros, entre los que también estaba Michael Küppers-Adebisi, seleccionó a 20 finalistas. Ahora tienen hasta el 7 de enero de 2024 para preparar su borrador.
"Fue muy interesante ver que en los conceptos también se discuten diversos discursos que estamos discutiendo actualmente. Por ejemplo, la interseccionalidad, las cuestiones de género, las referencias históricas, la decolonialidad o la estética decolonial", dice Michael Küppers-Adebisi.
Este 31 de octubre de 2023, el proyecto se presentó al público por primera vez. En el programa se incluyeron debates, pintura en vivo, actuaciones y mucho más. Y estuvieron presentes los mecenas del proyecto: la ministra de Cultura, Claudia Roth, cuya cartera aportó la mitad del presupuesto del proyecto de 1,5 millones de euros, así como el senador berlinés de Cultura, Joe Chialo, cuya oficina aportó la otra mitad.
La idea es que el memorial sea develado el 14 de septiembre de 2024.
(rml/ju)
emergencia en otro lugar además de en el teléfono móvil.
"Por supuesto, creemos firmemente que la culpa siempre es del agresor. Pero también sabemos que rápidamente pueden surgir situaciones peligrosas para las chicas y mujeres, y hay que estar preparados para ello", advierte Gottlöber.
Como precaución, algunas visitantes experimentadas llevan pantalones cortos debajo del "dirndl”. Denise, 25 años, de Múnich, dice: "Creo que, como mujer, no deberías beber demasiado. Tienes que vigilar lo que bebes y la gente que te rodea. Y no te alejes de tu grupo de amigos". Además, sugiere situarse cerca del personal de seguridad o de las camareras y evitar en lo posible a los hombres borrachos y agresivos.
Por su parte, Teresa Rodgers, de 40 años y procedente de Colorado, recomienda visitar el Oktoberfest por la mañana, cuando el ambiente es más tranquilo y las multitudes no están tan desinhibidas.
La seguridad, una responsabilidad conjunta
Otra iniciativa contra la violencia sexual en el Oktoberfest son los "WiesnGentlemen" (Caballeros de las Wiesn). Se trata de un proyecto de prevención lanzado en 2013 por la asociación sin ánimo de lucro Condrobs, que se centra en el comportamiento respetuoso, el consumo responsable de alcohol y la creación de un entorno festivo seguro, especialmente para las mujeres.
La iniciativa difunde su lema "El respeto es mi fuerza" a través de redes sociales, carteles, campañas escolares e interactuando con los visitantes que van de camino hacia el recinto del festival. Además, la asociación concede el 'Premio Wiesn al Valor', cuyo objetivo es reconocer y promover el comportamiento respetuoso. Se buscan ejemplos de coraje civil, en los que las personas hayan ayudado a quienes lo necesitaban. Un jurado evalúa las candidaturas y selecciona un ganador, que recibe un vale para un traje del Oktoberfest.
Quizá parezca extraño premiar "un comportamiento que debería ser evidente”, dice Birgit Treml, de Condrobs, "pero la triste realidad es que el comportamiento respetuoso no siempre es la norma". (ms/ers)