La empleada municipal acusada de robo no pudo presentar pruebas
Ayer comenzó el juicio contra Aurora Alicia Gómez, acusada de sustraer durante unos meses 280.000 pesos de la caja del Tesoro del Municipio en el 2016. Podría ir a prisión.
En la Sala III de la Cámara Penal inició el juicio contra la ex empleada municipal de Angaco, Aurora Alicia Gómez, apuntada por el robo de 280.000 pesos de la caja del área de Tesorería del departa‑ mento. Hay un video que la com‑ promete, sin embargo la acusada quiso presentar sus pruebas de la causa, ya que no pudo durante la investigación debido a un “mal ase‑ soramiento” de su defensa anterior, pero esto fue denegado por el juez. La negativa del magistrado no tapa la posibilidad que durante el trans‑ curso del debate la defensa de la ex cajera de la municipalidad angaque‑ ra pueda hacer las presentaciones de los expedientes. Sólo que no es el momento indicado luego de que ven‑ cieran los plazos de la instrucción. El debate empezó pasadas las 9. En la primera audiencia hubo lugar para la lectura del requerimiento fis‑ cal. La mujer fue procesada por peculado. El término es, en el campo del Derecho, la malversación de cau‑ dales públicos, según los términos penales. Tiene una pena de 2 a 10 años de prisión, por lo tanto la mujer podría terminar en la cárcel, sin embargo le favorece el hecho de no tener antecedentes.
QUÉ PASÓ El por qué de la causa
La exempleada está sospechada de haber sustraído durante los meses de octubre, noviembre y diciembre de 2016 la cantidad de 280.000 pesos de la caja de Tesorería muni‑ cipal y la caja del Servicio de Banco San Juan en el departamento. Cumplía funciones de cajera, aunque no tenía autorización para sacar o meter dinero, según las fuentes del caso. El tesorero municipal Néstor Fabián Chávez se dio cuenta del fal‑ tante de los billetes. Tras dos arqueos, el 30 de octubre y el 30 de noviembre, pidió al intendente José Castro instalar unas cámaras de seguridad en el lugar para descubrir lo que pasaba. El funcionario, al rea‑ lizar una vez más las cuentas en diciembre, se dio cuenta que seguía la problemática. Le pareció raro por‑ que siempre le cerraban las cuentas, por lo que se fijó en las filmaciones de las cámaras y ahí descubrió que Aurora Alicia Gómez sacaba los fajos de billetes y se los escondía en su ropa, según fuentes judiciales. La trabajadora no estaba autoriza‑ da a sustraer el dinero de la caja y lo único que hacía era cobrar impuestos y pagos de boletas de servicios, para luego rendirlos a la finalización de su horario. Los investigadores sospecharon que la angaquera actuaba en momentos que Chávez pagaba los sueldos de los demás empleados porque eran aquellos en el que el tesorero deja‑ ba las llaves en la caja.
Por ello, el intendente José Castro radicó una denuncia y a fines de diciembre del mismo año, la Policía detuvo a Gómez a la salida de su tra‑ bajo y allanó luego su casa. En el procedimiento, los agentes sólo pudieron recuperar apenas 54.000 pesos, que se encontraban en un bolso y en el placard. Los montos fueron reconocidos ya que los bille‑ tes habían sido marcados.
Las pruebas en su contra compli‑ can a Gómez, que previo a la aper‑ tura del debate no aceptó un acuerdo de juicio abreviado.