Legítimo derecho a manifestarse e inconsciencia sanitaria en plena cuarentena
Las movilizaciones estuvieron en el eje de la discusión en la provincia.
En esta última semana se ha vivido de todo, pero las manifestaciones sociales tuvieron su foco en San Juan y se llevaron todo el protagonismo. Nadie critica el legítimo derecho constitucional de expresarse (algo que la sociedad argentina sabe hacer muy bien), pero en el marco de una pandemia y cuarentena por coronavirus, pareciera que el fervor del reclamo le ganó al cuidado propio y del prójimo.
A sabiendas del mundo está el nivel de propagación que tiene el virus que tuvo su (presunto) origen en Wuhan, China, y que en el suelo sanjuanino se dio un brote inicial en el departamento Caucete, y de las medidas sanitarias que hay que tener en cuenta para evitar que el "monstruo" siga creciendo.
Sin embargo todo ello pasa a un segundo plano en todos aquellos que decidieron romper con eso y salir a las calles. Primero se criticaban duramente las marchas de los denominados "anticuarentena", luego fue repudiado el desplazamiento de la militancia en la visita del presidente Alberto Fernández a San Juan (hecho que fue criticado en una columna publicada en este mismo diario), y este pasado sábado se dio una nueva manifestación, de consignas varias, pero contra las medidas del Gobierno nacional. "Para defender la República", decían por lo alto en la manifestación. Amén de eso (y que, reitero, están en su justo derecho de manifestar), la prevención sanitaria individual y colectiva volvió a fallar.
Si bien se pudo ver en su mayoría gente utilizando tapabocas, otros lo llevaban mal o en algunos casos, se lo sacaban. El distanciamiento social brilló por su ausencia, aunque también es difícil de cumplir en un escenario donde, según estimaciones policiales, hubo alrededor de 2.000 personas.
Dentro de estos si se quiere "irresponsables" de la cuarentena entran quienes realizaron fiestas clandestinas. En esta pasada semana empezaron a realizarse las audiencias judiciales para, por ejemplo y entre otros, condenar a las 48 personas de la denominada "fiesta VIP". "Hay que aprender a convivir con el virus". Dicha frase es repetida en todos lados. La dijo incluso el gobernador Sergio Uñac. Pero si bien hay que convivir con el virus, algo que es totalmente cierto ante la falta de una vacuna, hechos como los vividos en esta semana no ayudan a evitar la propagación de este virus que tiene cansados física y mentalmente a todos, adultos y jóvenes.
Las manifestaciones están, se dan y seguramente seguirán, pero en la consciencia de cada uno estará el saber cuidarse y cuidar al otro para terminar cuanto antes con la amenaza de contraer coronavirus y así recuperar un estatus sanitario óptimo, como el que supo tener San Juan no hace tanto tiempo atrás.