Entre el ahorro y el costo político
Los números de cuánto sería el ahorro fiscal de suspender el esquema de rebaja gradual de retenciones no tardaron en emerger. Si bien desde el Gobierno aseguraron que aún no los habían hecho, desde el sector privado calcularon que a los precios internacionales y al tipo de cambio vigentes, la modificación del escenario se traduciría en un “aporte” desde el complejo sojero de $ 10.700 millones y, por imponer retenciones a las exportaciones de 10% al maíz y al trigo, darían otros $ 14.100 millones. “Entre ambos agregarían un 0,2% del PBI esperado para el año, es decir, casi $ 25.000 millones”, explicó el economista Federico Furiase, de Ecogo. Esos $ 25.000 millones pueden sonar a poco, dado el costo político de quitarle ingresos al sector que jugó fuerte para lograr que Macri llegue a la Presidencia. El cálculo es similar al que ayer rondaba por las mesas de los dirigentes rurales, que ultimaban detalles por si Macri los convoca tras el pedido de audiencia urgente que le cursaron. En un escenario eventual de retenciones a la soja en 27,5% y que las de maíz y trigo, el Estado captaría unos u$s 930 millones extra en esta campaña. Y calcularon que se sumarían otros u$s 2200 millones en 2019.