Para la Fed, la inflación alta de EE.UU. es un “fenómeno temporal”
En su presentación ante la Cámara de Representantes, el líder de la Fed, Jerome Powell, ratificó la postura del banco central norteamericano y afirmó que están muy lejos de reducir la asistencia fiscal
A pesar de la creciente, inflación –los precios al consumidor de junio cerraron con una suba de 0,9% mensual y 5,4% interanual, el mayor aumento desde 2008– la Reserva Federal sostiene que se trata de un fenómeno transitorio, aunque está preparada para actuar si es necesario.
Previo a su presentación en la Cámara de Representantes, el titular de la Fed, Jerome Powell, dijo que la inflación ha crecido “notablemente” y que es probable que se mantenga “elevada en los próximos meses antes de moderarse”. También señaló que la institución estaría preparada para “ajustar la postura de la política monetaria” si ven señales de que “la trayectoria de la inflación o las expectativas de inflación a largo plazo se están moviendo materialmente y de forma persistente más allá de los niveles consistentes con nuestro objetivo”
Luego de que el martes se dieran a conocer los datos de los precios al consumidor, ayer se difundió la inflación mayorista de junio, que aumentó 1% respecto a mayo y 7,3% respecto al mismo mes de 2020, aumentando la presión de las empresas por trasladar las subas a los consumidores. La mayor parte del aumento estuvo vinculada a los servicios.
Mientras algunos advierten sobre el ‘recalentamiento’ de la economía, Powell defendió su posición de que se trata de un fenómeno temporal, aunque ya lleve varios meses.
Según Powell, “las lecturas de alta inflación son para un pequeño grupo de bienes y servicios directamente relacionados con la reapertura” y se diluirán con el tiempo.
En declaraciones anticipadas de su presentación, Powell explicó que “la fuerte demanda en los sectores en los que los cuellos de botella de la producción u otras restricciones de la oferta han limitado la producción ha provocado subidas de precios especialmente rápidas para algunos bienes y servicios, que deberían revertirse parcialmente a medida que los efectos de los cuellos de botella desaparezcan”.
El titular de la Fed recibió un fuerte escrutinio especialmente por parte de los legisladores republicanos, preocupados por el exceso de estímulo fiscal. Anthony González (republicano por Ohio) apuntó contra el nuevo marco de la Fed, que tolera que la inflación exceda “de forma moderada” la meta del 2% “durante algún tiempo”.
“¿Cuánto tiempo es ‘algún tiempo’?”, preguntó González. “Depende –respondió Powell–. En este momento, la inflación está muy por encima del 2% (...) La pregunta para el Comité [Federal de Mercado Abierto o FOMC] será dónde nos dejará esto en seis meses”.
Varias autoridades de la Fed coinciden con el diagnóstico de Powell. La presidenta de la Reserva Federal de San Francisco, Mary Daly, dijo esta semana que “varios meses” de inflación “no significa que no sea transitorio”.
Muchos temen que retirar el apoyo de la Fed antes de tiempo – especialmente la compra mensual de bonos por u$s 120 mil millones– podría tener un impacto negativo en el mercado laboral estadounidense, que perdió 10 millones de empleos durante la pandemia y todavía no ha logrado recuperarse completamente.
En este sentido, Powell destacó que cualquier movimiento para reducir la asistencia a la economía “aún está muy lejos”.
Hasta ahora, la Fed ha logrado convencer a la mayoría del mercado de que la situación inflacionaria está bajo control. Pero algunos funcionarios que integran el FOMC, creen que la Fed debería empezar a reducir progresivamente sus medidas de asistencia.
“Las continuas lecturas de alta [inflación] aumentarán las tensiones en el FOMC”, le dijo Peter Williams, economista de Evercore ISI, al Financial Times.
“Algunos de los miembros más agresivos probablemente señalarán que el patrón de inflación de los últimos meses sugiere que el tapering [el retiro progresivo de los estímulos fiscales] debería comenzar ya en septiembre”, añadió Williams, aunque predijo que “el grueso del comité favorecerá la explicación transitoria por ahora”.
Algunos funcionarios de la Fed, como Daly, también están preocupados que la variante Delta del coronavirus, que ya es dominante en los EE.UU. y se está extendiendo rápidamente por el mundo, podría frenar le reapertura de la economía norteamericana, generando un impacto en la recuperación y los precios, que podrían bajar como sucedió en 2020.
Según Powell las cifras de inflación están relacionadas a la reapertura de la economía