Deuda contenida: Ciudad de Buenos Aires no emitiría más hasta el 2024
La Ciudad tiene equilibrio fiscal pero no es sostenible por quita de fondos que dispuso el gobierno nacional. El primer vencimiento de deuda lo tiene en 2024. El plazo promedio de los bonos es 5,7 años
El gobierno de la Ciudad de Buenos Aires no tiene previsto emitir deuda hasta el fin de su gestión. Funcionarios del área que responden directamente a Horacio Rodríguez Larreta señalaron a El Cronista que la única operación financiera que podrían concretar es, si hubiera una ventana en el mercado financiero, la de aliviar los vencimientos de deuda en 2024, de manera tal que quien sea el nuevo Jefe de Gobierno, tenga el camino limpio en lo financiero”.
La embestida del gobierno nacional igualmente por los fondos de la coparticipación afectó la situación fiscal del distrito porteño, lo que obligó a podar drásticamente el gasto público y a aumentar impuestos (tarjetas) y dejar sin efecto la exención a las Leliq. Se dejaron de hacer obras nuevas: no se inició ninguna de envergadura desde 2020 hasta hoy y se debieron renegociar todos los contratos desde la recolección de residuos, espacios públicos, mantenimiento hospitalario. El gran problema es que esta poda de gastos no es sostenible en el tiempo dado que no se puede congelar por muchos años la nueva obra pública, lo mismo que los mantenimientos de servicios básicos.
La actual situación de CABA, prácticamente de equilibrio presupuestario, suena como música para los oídos de los tenedores de deuda porteña. Igualmente se sigue de cerca la sostenibilidad de los números tras la quita dispuesta por el kirchnerismo a los fondos de coparticipación, diferencia surgida tras el traspaso de la seguridad. El interrogante no sólo pasa por lo que decida el tribunal supremo sino también cuándo tomarán esa decisión, de alto impacto político, no sólo jurídico.
Pese a las dificultades financieras del país desde el 2018, CABA evitó entrar en default a diferencia de otras distritos, lo que se ve reflejando en la menor tasa de rendimiento que tienen los papeles porteños. Desde el 2015, el ministro Martín Mura buscó contener el endeudamiento y estirar los plazos de vencimientos, que pasaron de un promedio de 2,8 años en 2015 a los 5,7 años del vencimiento promedio actual. El resultado financiero porteño apunta a ser equilibrado en 2022, lo que significa que aún contabilizando el pago de intereses, habrá un equilibrio entre ingresos y gastos totales. De nuevo, el desafío es sostenerlo en el tiempo. Más allá de estos números, el alto riesgo país y la incertidumbre sobre el gobierno nacional y la economía en general impiden que CABA pueda obtener fondos frescos en mercados. Y menos a tasas razonables.