Tasas de la Fed: Caputo empieza a sentir rigor del contexto global
Afectados por el escenario internacional, los bonos argentinos están transitando un incipiente proceso correctivo en los últimos días. Todos los tramos de la curva retroceden y se alejan levemente de sus máximos. Los bonos a 2029 y 2030 bajaron ayer 3,8% y 3% respectivamente.
Los Globales a 2035 y 2038 retrocedieron 4,3% y 3,8% en los últimos 3 días, mientras que los bonos de mayor plazo que vencen en 2041 y 2046 bajaron ayer y acumulan una merma de 4,8% y 4,1% respectivamente desde sus picos recientes. Los bonos locales importan la volatilidad que se está evidenciando en el mercado de deuda global.
En concreto, los últimos datos macroeconómicos postergan el inicio de baja de tasas de la Fed. Esto provoca un rally en las tasas de los bonos del Tesoro de EE.UU. y la deuda argentina sufre el contexto de mayor volatilidad global. El PBI de EE.UU. aumentó a una tasa anualizada del 1,6%, y estuvo por debajo de las previsiones de 2,5% que tenían en mente los economistas.
Además, en el mismo informe se conoció el dato de inflación subyacente en el PBI y el mismo saltó por encima de lo que los inversores esperaban. La misma avanzó al 3,7%, por encima del 3,4% esperado por los inversores. Para los analistas, ambos datos configuran un contexto de estanflación.
A esto hay que sumarle registros de inflación publicados en el último mes que también estuvieron por encima de lo que esperaban los economistas. Además, la economía trabaja con niveles de pleno empleo y el consumo dio muy por encima de lo que se esperaba.
Con estos datos, los inversores postergaron la baja de tasas una vez más, ubicando el primer recorte en diciembre de este año. A comienzo de 2024 los inversores esperaban que la Fed baje la tasa en hasta 6 veces, comenzando en marzo. Luego se postergaron el inicio de baja de tasas, y finalmente ahora se espera que el primer movimiento sea en diciembre, dejando una sola baja para todo el año.
VIENTO DE FRENTE
En este contexto, se consolida la idea del “higher for longer” de la Fed, por lo que el mercado consolida la idea de que la Fed mantendrá las tasas altas por más tiempo. El hecho de que las tasas se mantengan altas por más tiempo podría representar un viento de frente para los bonos argentinos.
Juan Manuel Franco, economista jefe de Grupo SBS, detalló que en lo que va del año, el mercado se fue acomodando a que la economía de EE.UU. se mantenga robusta y que los componentes más subyacentes de la inflación aún están lejos de correr al ritmo objetivo de la Fed. “Por ello, el mercado pasó de esperar casi 6 recortes de tasas este año a pricear menos de 2 desde hace algunas semanas. En tanto, las tasas largas subieron con fuerza en el último mes móvil”, afirmó. En ese sentido, y pensando en el impacto sobre Argentina, Franco explica que en
“Las probabilidades de recorte de tasas bajaron de arriba del 80% a casi el 20%”, dijo Maximiliano Bagilet.
“En un entorno de tasas más altas, la deuda de mercados emergentes se ve presionada”, adviritió Juan Manuel Franco.
un entorno de tasas altas, la deuda emergente se ve presionada, aunque en el caso nuestro, los factores domésticos pesan mucho. “Creemos que, si bien el mercado externo, de ponerse volátil, implicaría algo de viento en contra, si se atienden a fondo los desequilibrios macro argentinos y se corrigen, aún podría haber valor para los inversores en deuda soberana en dólares de Argentina”, dijo.
Maximiliano Bagilet, Team líder de TSA Bursátil, remarcó que a nivel local, los inversores en bonos argentinos siguen de cerca del ritmo inflacionario en EE.UU. “De estancarse la inflación en EE.UU en estos niveles vemos un riesgo real de aumento de tasas. Las probabilidades de recorte de tasas bajaron de arriba del 80% a casi el 20%. De cualquier manera, con un escenario de economía más caliente y de pleno empleo ya descartamos los dos recortes que se proyectaban a principio del año. Esto se empieza a descontar de manera selectiva en emergentes así como también en algunos activos locales”, dijo Bagilet.