NO TAN MUERTA
LOS CAMPOS DE SHALE GAS Y SHALE OIL DE VACA MUERTA COMENZARON A PRODUCIR A NIVELES RELEVANTES HACIA FIN DE AÑO TRAS LA PARALIZACIÓN DE LA PANDEMIA. LA EXPECTATIVA SOBRE UNA VERDADERA REACTIVACIÓN.
Las productoras de gas no convencional, como YPF, Pampa Energía o Tecpetrol, entre otras, ponen el foco en el Plan Gasar, la iniciativa impulsada a fin de año por el Gobierno para intentar asegurarse producción para el invierno de este año. Sin este programa, también conocido como Plan Gas 4, era inevitable que el país tuviera que importar GNL por barco para abastecer la demanda de los meses más fríos del año, destinando muchos más dólares en momentos donde escasean. En petróleo Vaca Muerta también tiene mucho para dar. Además, ahora cuenta con viento a favor con la suba del precio del barril de petróleo Brent, que cotiza en la Bolsa de Londres y es de referencia para el mercado argentino. Al término de esta edición, el precio estaba llegando a casi US$ 70.
La recuperación en los últimos meses en la producción de crudo no convencional es un dato positivo para la industria. En enero, YPF, la compañía controlada por el
Estado, repuntó su producción un 38% alcanzando 78.200 barriles diarios. Es la principal operadora de la formación no convencional. En ocho meses YPF logró revertir los efectos que le provocó la pandemia. La compañía, que salió momentáneamente de reestructurar toda su deuda, informó que opera en Vaca Muerta con 41 equipos, de los cuales 11 son de perforación y 30 de terminación de pozos. Para este año planea una inversión de US$ 2.700 millones, de los cuales US$ 1.300 millones serán para no convencional. La compañía lleva invertidos desde 2013 alrededor de US$ 9.000 millones en Vaca Muerta.
Otra petrolera que repunta en la producción de petróleo no convencional es Vista Oil & Gas, la compañía liderada por Miguel Galuccio, que se convirtió en la segunda productora de shale oil por la actividad de perforación que tuvo en el último trimestre de 2020. En febrero, anunció públicamente que proyecta poner en producción 16 nuevos pozos en Vaca Muerta durante el 2021, llegando así a 36 en total. Planea aumentar la producción de hidrocarburos un 40% con una inversión de US$ 275 millones, un 23% más que el año anterior.
Alejandro Monteiro, ministro de Energía y Recursos Naturales de Neuquén, es optimista: “Venimos de un año complicado, donde la actividad se redujo a cero, y solamente se sostuvo la actividad de producción en los yacimien
ESTE AÑO VACA MUERTA ESPERA DESEMBOLSOS POR US$ 3.500 MILLONES, CONSIDERANDO INVERSIÓN EN POZOS Y EN INFRAESTRUCTURA.
tos; esto estuvo acompañado por una caída de precios. A partir de un trabajo en conjunto con operadoras, sindicatos y trabajadores, la actividad logró reactivarse progresivamente, en línea con lo proyectado hace unos meses. En términos de equipos, en el mes de febrero en Neuquén trabajaron en promedio 66 equipos de torre, de los cuales 24 son de perforación. De la misma manera, tanto en enero como en febrero tuvimos muy buenos niveles de actividad en lo que hace a cantidad de fracturas, alcanzando valores cercanos a las 700 etapas”.
Y agrega: “En términos de producción, enero también mostró muy buenos números respecto del petróleo al alcanzar los 172.790 barriles diarios, de los cuales el 78% provienen de producción no convencional. Este valor supera la producción prepandemia, con un volumen que no se producía desde 2005”.
Monteiro remarca que “en el caso del gas, si bien la producción durante 2020 tuvo una disminución del 8,4%, tenemos muy buenas expectativas para los próximos meses en el marco del Plan Gasar a partir de la reactivación de la actividad de perforación y de terminación de pozos en Vaca Muerta”.
Por su parte, Oscar Sardi, CEO de Transportadora Gas del Sur (TGS), la compañía que opera un sistema de 9.150 kilómetros de ductos por donde pasan 85 millones de metros cúbicos diarios de fluido, describe un panorama inmediato: “El desarrollo de la cuenca, en el contexto actual, presenta un escenario fuertemente dependiente del Plan Gasar. Las expectativas de repunte de la actividad son claras y ya se están viendo algunas señales en ese sentido. De continuar una perspectiva optimista, creemos que la producción de gas podría alcanzar en el invierno 2021 los mismos valores que en 2020, con un nivel de actividad en ascenso”.
Uno de los temas centrales de Vaca Muerta son los ductos y la capacidad de evacuación y recuperación de los hidrocarburos no convencionales. Al respecto, Sardi señala que “la infraestructura de captación de gas de TGS en Vaca Muerta tiene capacidad remanente suficiente como para hacer frente a las necesidades de la cuenca por los próximos años. Estamos realizando obras de ampliación en nuestra Planta de Acondicionamiento de Gas Tratayén, previendo mayores arribos de gas a partir del invierno de este año. En cuanto a la infraestructura de transporte regulado, si bien es poco probable que los ductos troncales se completen durante el próximo invierno, creemos que es necesario trabajar en una solución a mediano plazo para resolver el transporte de volúmenes crecientes de gas desde la cuenca neuquina, hasta las áreas de gran demanda de gas del país”.
El CEO da cuenta de que, en esta línea, desde la compañía vienen impulsando la que para ellos resulta la mejor solución técnico-económica, que es la construcción de un nuevo gasoducto troncal que, en una primera etapa, vincule el área de Tratayén en Neuquén con el sistema de transporte regulado de TGS en la planta compresora Saturno, próxima a la localidad de Salliqueló (Buenos Aires). En una segunda etapa, vincular Salliqueló con el sistema de transporte regulado de TGN (Transportadora Gas del Norte) en su planta compresora San Jerónimo, para desde ese punto llegar a la región litoral del país”.
El ministro de Energía neuquino reconoció que para este año esperan una inversión de US$ 3.500 millones considerando la inversión en pozos como en infraestructura. “Las expectativas son muy buenas en tanto se puedan sostener ciertas condiciones mínimas para el desarrollo de las inversiones. El nivel de actividad viene creciendo mes a mes en línea con la mejora de la situación sanitaria. Si bien esta industria siempre mira el mediano y largo, con los niveles de precio observados en los últimos meses, en el caso del petróleo, creemos que pueden estimular nuevos proyectos e inversiones bajo ciertas condiciones mínimas que se requieren para su concreción y para que Vaca Muerta pueda dar ese salto de magnitud que todos sabemos que puede dar”, destaca Alejandro Monteiro.
“Como empresa de midstream (transporte de hidrocarburos), en Vaca Muerta trabajamos e invertimos para agregar valor a los servicios integrados a productores que ofrecemos en la cuenca –dice Sardi–. Finalizada su construcción, ya comenzamos a operar una planta de tratamiento de gas en el área de Shell en Bajada de Añelo. Este proyecto nos posiciona como un socio estratégico capaz de satisfacer la provisión de servicios en todos los eslabones de la cadena de valor del gas natural, acercándonos cada vez más al boca de pozo, como sucede en las operaciones no convencionales más importantes del mundo”. En esa línea, continuó: “Estamos realizando obras de ampliación en nuestra Planta Tratayén para permitir mayor capacidad de captación y acondicionamiento de gas en el corazón de Vaca Muerta. Además, estamos trabajando en el desarrollo de un proyecto de procesamiento de gas en esta planta, que permitirá que los productores recuperen los productos de mayor valor que se encuentran en el gas natural (propano, butano y gasolina natural). Asimismo, nuestro posicionamiento en otros activos, como nuestras plantas de Río Neuquén y Plaza Huincul, nos permite brindar soluciones específicas para cada cliente, fortaleciendo nuestro liderazgo como primer midstreamer de la cuenca”, concluyó.