Premio a la Trayectoria Empresaria / Jorge Brito
Se inició en la actividad empresaria hace cuatro décadas. Presidente y principal accionista del Grupo Macro, diversificó sus negocios hacia el rubro inmobiliario, las energías renovables y la agroganadería. Sueña con comprar el Citi y lamenta el rumbo que
El presidente y principal accionista del Grupo Macro se llevó el premio por sus más de 40 años en la actividad empresarial. Logros y desafíos de cara al futuro.
Cuarenta años en el mundo de los negocios está cumpliendo Jorge Horacio Brito, y la celebración coincide con la obtención del Premio Fortuna a la Trayectoria Empresaria, galardón que en ediciones anteriores recibieron Alfredo Coto, Eduardo Eurnekian, Carlos y Alejandro Bulgheroni, entre otros. La distinción encuentra a Brito en plena actividad en varios frentes y con una mirada esperanzadora sobre la Argentina que viene. En la serenidad de su amplísimo despacho en el centro porteño recibe a Fortuna. “Al haber comenzado de cero no puedo más que sentirme contento con todo lo hecho. Me han preguntado si éste era mi objetivo y es imposible haber soñado algo así. Naturalmente, uno se fija objetivos de mediano y largo plazo, pero esta profesión es un desafío constante. Hoy estamos expectantes de ver si cerramos la compra del negocio minorista del Citi. Justamente, el buen emprendedor es aquel que siempre piensa en el futuro y en seguir creciendo”.
Presidente y accionista principal del Grupo Macro, con participación además en el rubro inmobiliario a través de la desarrolladora Vizora, en Inversora Juramento (ganadería) y Genneia SA (energías reno-
vables), Brito es consciente de que “para cualquier empresa el recurso más escaso es el humano. Si uno apuesta al crecimiento debe prepararse formando cuadros que lo acompañen”, asegura.
FORTUNA: ¿Siente el reconocimiento de sus pares?
BRITO: No es algo en lo que me fijo. Cuando uno hace, no mira qué está haciendo el de al lado. Si me hubiera quedado esperando leer buenas noticias en los diarios para definir una inversión, no habría hecho nada.
FORTUNA: ¿Qué lo llevó a diversificarse?
BRITO: Considero que no es bueno tener un sistema financiero con entidades que posean más del 10% de un sector. Las grandes concentraciones no son buenas. Por otra parte, han ido surgiendo negocios interesantes como el de las energías renovables o la agroindustria, donde estoy desde 2009 a través de Inversora Juramento. Esta empresa es la única del país que realiza todo el proceso ganadero, desde la cría, faena, frigorífico, exportación, y ahora también la venta a través de carnicerías propias. Incluso producimos el alimento (maíz, alfalfa) que consumen los animales en el feedlot. Creo en este proyecto porque entiendo que en el mundo en los próximos 50 años va a sobrevenir una gran crisis alimentaria, y la Argentina necesita generarle valor agregado a sus alimentos.
FORTUNA: Ha sido el mentor de la carrera empresarial de varios de sus hijos: Milagros en Vizora, Jorge como vicepresidente de River, Marcos en Macro e Inversora Juramento…
BRITO: No me considero un mentor. Ellos tuvieron inquietudes y yo los ayudé. A mis hijos les inculqué que no se trata de dedicarle la vida entera al trabajo sino de asignar bien el tiempo, que es un bien escaso. Cuando uno se levanta a la mañana debería pensar en qué va a invertir su tiempo, no en qué lo va a gastar.
FORTUNA: ¿Qué le dejaron los 13 años como presidente de Adeba?
BRITO: Me quedó una sensación cercana a la derrota al no poder tener un sucesor. La Asociación tuvo que modificar los estatutos que fijaban que solo un presidente de banco podía ser titular de Adeba para permitir que alguien que no lo fuera llegara a ese cargo. Se pasó a un esque-
ma de director-presidente rentado, algo que yo pienso que no es bueno porque demuestra que la dirigencia argentina siente temor del poder de turno. Pareciera que si el director rentado se enoja no hay problema porque esa persona no es dueña de una empresa. Por el contrario, yo pienso que siendo uno presidente de una entidad y accionista de una empresa, el poder de turno puede comprender mejor el compromiso que asume.
FORTUNA: Es un modelo de gestión que se ha extendido en el último tiempo…
BRITO: Es cierto. Si miramos hacia atrás, en los años ’80 estaba el Grupo de los 8: Franco Macri, Maccarone, Blanco Villegas, Richard Handley del Citibank; eran todos presidente de las grandes empresas del país. Eso sí era asumir un compromiso, algo que hoy no tenemos en la representación institucional de las cámaras. ¿Por qué no seguí al frente de Adeba? Bueno, dos años atrás yo ya había anunciado que dejaba el cargo. Acepté ese último período porque no quería que se viera como que los Kirchner me echaron. Era el peor momento de nuestra relación, y no por mí sino por ellos.
FORTUNA: ¿Cómo fue su vínculo con Guillermo Moreno?
BRITO: Nunca le atendí el teléfono, él llamaba e insultaba a todos mis empleados. Las dos veces que me convocó en el último año como secretario de Comercio lo hizo por carta documento, con la advertencia de que si no iba me llevaría por la fuerza pública. Fui a verlo, le dije ‘hablame bien y con respeto porque si no me levanto y me voy’. Y habló bien y con respeto.
FORTUNA: ¿Qué pasa con el Citi?
BRITO: Estamos en la última etapa de negociación, seguramente iremos a un tercer sobre de oferta final. El Macro se hizo pensando en el interior del país donde hay mucho por bancarizar, y el Citi tiene sesenta sucursales en lugares donde nosotros no estamos. Sólo nos solapamos en diez sucursales, pero son lugares donde Macro tiene un crecimiento muy importante.
FORTUNA: ¿Qué opina de la política económica de Macri?
BRITO: Sacar una foto hoy es injusto. Hay que ver la película completa, es decir, la situación en la que el Presidente recibe el país. El rumbo que le ha dado a la economía es el correcto, lo que hay que ver es si los instrumentos son adecuados o hay otros mejores. El blanqueo es algo muy importante para este Gobierno y en este sentido soy optimista, creo que la cifra va a estar cercana a los u$s 70.000 millones.