Por qué el blanqueo no está funcionando

Al fin, un analista que se anima a explicar, una por una, las verdaderas objeciones al blanqueo de capitales propuesto por el Gobierno. Las razones de que el 40% de la economía se mueva en la informalidad.

Las verdaderas objeciones al blanqueo de capitales propuesto por el Gobierno. Las razones de que el 40% de la economía se mueva en la informalidad.

Cómo viene el blanqueo? — Bastante mal. La gente no está entusiasmada, las propuestas no son atractivas, la multa es elevada y resulta sumamente engorroso realizar el trámite ante bancos y ante el propio organismo de control.

—Vamos por parte, ¿por qué la gente no está entusiasmada?

— En primer lugar, la presión tributaria en la Argentina es muy elevada. El problema no es blanquear un auto, una casa o una nueva maquinaria para la empresa; los problemas comienzan cuando, una vez blanqueado, hay que incrementar los ingresos porque pagás más impuestos y tenés que buscar un nuevo punto de equilibrio.

—¿Por qué decís que las propuestas no son atractivas?

— Voy a detallar las objeciones. El Gobierno no acepta blanquear bienes de cambio; esto es malísimo para las empresas. El blanqueo era ideal para permitir blanquear stock. Si querés blanquear, tenés que liquidar el stock en el mercado y luego llevar los pesos al blanqueo. Demasiado engorroso y nadie quiere liquidar su stock a precio vil.

Las propiedades deben blanquearse a valor de mercado. Si vos compraste una propiedad en Punta del Este o en Miami a u$s 200.000 y hoy vale u$s 500.000, el pago de la multa es sobre este último valor y queda en tu patrimonio valuada a este último precio. Lo que implica pagar una multa del 5% más impuesto a los bienes personales de por vida. A esto le tenés que sumar un alquiler presunto y pagar algo de ganancias.

Para los que blanquean dinero efectivo, una multa del 10% luce elevada en un sistema tributario que te deja en calzoncillos cuando menos te das cuenta.

Se ofrecen bonos para no pagar la multa, pero se inmoviliza el dinero por 3 años en un caso y por 7 años en el segundo. En una economía con una inflación en dólares de dos dígitos, el Gobierno pretende que le dejen dinero por 3 años a tasa 0%, ó 7 años a una tasa del 1% anual en dólares.

Se permite invertir en Fondos Comunes de Inversión, pero hay que mantener el capital por 5 años. En la Argentina 2 años es el largo plazo porque nadie sabe quién gana la próxima elección.

Los bancos no están preparados para dicha operatoria.

Se va a blanquear mucho dinero de cuentas del exterior, pero no por una acción coordinada y efectiva del Estado nacional. Se debe a que en el mundo los controles de dinero se han vuelto muy rigurosos.

—Acabás de matar al blanqueo.

— Al contrario, el Gobierno está a tiempo de dar un golpe de timón y mejorar la propuesta. El país necesita que ingresen capitales para la inversión. Por otro lado, hay que bajar la presión tributaria; de lo contrario el dinero negro que se blanquea hoy generará nuevos ingresos para el emprendedor, que los ocultará del Estado por la misma razón que lo hizo en el pasado: “la gran presión tributaria”.

—¿Cómo te animás a hablar del negro?

— Si no sos claro, admitiendo que estamos en una economía que en un 40% está en la informalidad, no podemos entender el problema de la presión fiscal, y la no exteriorización de activos. —Te veo negativo.

— En absoluto. Si vienen inversiones extranjeras a Macri le puede ir muy bien. Le iría mucho mejor si toca timbre en la casa de empresarios nacionales para que le expliquen lo que pagan de impuestos.

*TITULAR DE LA CONSULTORA SALVADOR DI STÉFANO Y ASOCIADOS, DE ROSARIO

Este blanqueo ofrece un sueño tranquilo pero con los bolsillos vacíos. A los argentinos les gusta más la fórmula inversa.