Macri se llevó las metas fiscales a marzo
Cuáles podrían ser las consecuencias de no atacar el gasto público y confiarse en el endeudamiento perpetuo. Y cómo hacer para achicar el Estado.
Un análisis de Diego Giacomini sobre los dos primeros años de Gobierno. Las consecuencias de no haber atacado el déficit fiscal. Cómo reducir el Estado.
UN ANáLISIS DE LOS DOS AñOS DEL GOBIERNO
Numerosos son los incumplimientos de metas económicas explícitas o implícitas desde el inicio de la administración de Cambiemos. La lista de incumplimientos es larga para dos años de gobierno: brotes verdes del segundo semestre del año pasado; inflación del 2016 (+41%) que superó ampliamente las previsiones del anterior ministro Alfonso Prat Gay (+25%); metas de crecimiento 2017 (3,5% en un principio, que luego se bajó a 3% y ahora, si todo sale bien, estamos “todos contentos” con +2,8%) y meta de inflación 2017 (+17%/+12%) por 7 puntos porcentuales (+24%).
Por el contrario, la meta fiscal de superávit primario del 2017 se está cumpliendo; y esto es positivo. Es más, esto gana envergadura si se tiene en cuenta que el problema económico de fondo es fiscal. En este marco, siempre insistimos que una rápida reducción del déficit fiscal representa la mejor política económica que podría realizar el Gobierno Nacional, ya que los actuales objetivos de inflación y/o crecimiento son inconsistentes con el presente déficit fiscal actual.