A LA MODA
Este mes de mayo, bien vale la pena hacer un recuento de todo lo que la moda masculina está proponiendo para cambiar viejos hábitos o, simplemente, para sorprender con la cantidad de variaciones a las que se pueden someter las vestimentas que creemos eternas. En este número se abren paso nuevas combinaciones para los eternos trajes con camisa y corbata y se recarga el significado del atuendo todo terreno con las saharianas militares, de los infaltables trench coats, surge la obsesión por la gamuza y aparecen todo tipo de prendas y accesorios que pueden darle una nueva vida a nuestra forma de vestir Sin olvidar, desde luego, los diferentes estilos de zapatos que debemos usar y que nos permiten enviar uno de los principales mensajes de nuestra idea de estilo. Aquí podrás escoger entre los actuales penny loafers, derbies, brogues, monkstraps, power sneakers, topsiders o desert boots, y así poder mezclar sin errores los mejores looks posibles A esta gran guía habría que sumarle nuestro artículo sobre los llamados wearables (o vestibles, en español) que nos lleva directamente a la apasionada relación que se ha establecido entre ropa, accesorios, salud, diversión y tecnología. Relojes y bandas que miden el nivel de acondicionamiento físico, chaquetas de mezclilla inteligente y auriculares especiales, son algunos de estos elementos que miles de personas están usando en sus cuerpos como parte de su indumentaria cotidiana Y, por último, para redondear este número especial centrado en lo más reciente de la moda masculina, vale la pena leer el texto acerca de los personajes que, sin ser diseñadores, influyen de manera decisiva en las tendencias y en la dirección que toma la forma de vestir de los hombres hoy en día. Fotógrafos, productores, modelos, directores de grandes tiendas departamentales y otros más, hacen que sus opiniones y decisiones moldeen esa enorme industria de manera significativa, aunque muchas veces desconocida para el común de las personas que, sin saberlo, terminan consumiendo lo que ellos propusieron desde sus trincheras