No hay nada mejor que casa
a llegada de la pandemia global de coronavirus generó un shock en miles de empresas alrededor del planeta por diferentes motivos, en especial en aquellas que demoraron el inicio de su transformación digital y que a partir de las medidas de aislamiento social vieron comprometidos sus modelos de negocios y generación de ingresos. A contramano, otras firmas que iniciaron ese proceso digital con antelación, luego del cimbronazo inicial generado por el COVID-19, emergieron con mayor fuerza y mejoraron de forma considerable sus números. En ese contexto, comenzó a hacerse habitual para firmas de diferentes sectores términos como conectividad VPN y Escritorios Remotos para poder seguir adelante con el desarrollo de sus negocios. Una conexión VPN permite conectar a cualquier usuario a otra red. Por ejemplo, si uno tiene en la oficina una red, mediante una conexión VPN, cualquier persona desde su computadora personal, de forma remota, se puede loggear y conectar, y trabajar como si estuviera en esa oficina. En tanto, un escritorio remoto es un sistema, un software que un usuario debe tener instalado en una terminal, que puede ser una computadora, tableta o smartphone, y que mediante el ingreso de un nombre de usuario y contraseña, puede conectarse a un servidor virtual alojado en la nube, que aparece como un servidor remoto, pero que posee una interface similar a la de una computadora. Para tener un software de Escritorio Remoto los usuarios deben contratar servicios denominados VDI — Virtual Desktop Infraestructure, por su nombre en inglés— que son plataformas especiales para dar este tipo de soluciones. En un VDI, cualquier usuario desde su terminal puede acceder a él. La diferencia es que todo el software, los procesos y lo que está almacenado no está localmente en una computadora física, sino en la nube. Juan Ozino Caligaris es Country Manager de Nubity, empresa especializada en la optimización de los servicios en la nube, fundada en 2014, junto a Darío Peña, su actual CEO. En diálogo con
Caligaris precisó que desde el arranque de la pandemia las oportunidades de negocio con este tipo de soluciones crecieron hasta 300 por ciento.
Al ser partner de los grandes proveedores de soluciones en la nube, Nubity crece actualmente en el orden del 15 por ciento de forma trimestral. “La tecnología de Escritorios Remotos está basada en la tecnología de virtualización y posee un montón de ventajas: mejora la productividad y es cómoda. Como usuario se puede acceder a todas las aplicaciones y servicios configurados desde cualquier lugar; brinda rapidez gracias a las mejoras en las conexiones a Internet, y es flexible y escalable. Si se suma una persona nueva al equipo, por ejemplo, en un par de clics ya se le puede crear todo el entorno de trabajo”, explica. Según el ejecutivo estas tecnologías también facilitan todo lo referido a inventario del harware. “Básicamente, porque ya no se necesita tener hardware. Tampoco un problemas con el inventario del software y las licencias porque el administrador de los escritorios remotos determina el software de cada usuario. Además, es una tecnología más segura por tener encriptaciones de seguridad y siempre se puede realizar un backup de la información”, añade. A partir de la cuarentena, Nubity consiguió posicionar soluciones que permiten el ahorro de costos. “Una de esas soluciones está muy ligada a esta cultura de las startups de Bring Your Own Device. Cada persona trabaja con su equipo personal y se conecta con su escritorio remoto corporativo”. La otra solución es un producto que trabaja con la tecnología de Amazon Web Services (AWS), uno de sus proveedores-partner. “Hace que el escritorio virtual se prenda o
se apague según el uso que le da la persona localmente. Por ejemplo, el escritorio remoto en la nube está apagado, pero el usuario, al prender su PC y hacer doble clic en el software, puede encenderlo. A la hora del almuerzo, si el usuario deja el equipo prendido, el software envía una señal a la nube y se suspende temporalmente. Así, permite un ahorro de hasta un 70 por ciento. Jeff Barr, Chief Evangelist de AWS, explica a
que la empresa actualmente ayuda a facilitar la transición de la oficina o el aula al hogar con diferentes herramientas. “Por ejemplo, Amazon Workspaces permite lanzar escritorios virtuales de Windows y Linux a los que se puede acceder desde cualquier lugar y desde cualquier dispositivo; Amazon Workdocs facilita la colaboración con otros desde cualquier lugar y dispositivo; Amazon Chime incluye chats y videollamadas hasta para 100 participantes desde una sola aplicación; y AWS Client VPN permite configurar conexiones segura desde cualquier lugar”, enumera. En tanto, Hernán Mazzeo, gerente de Servicios IT de iplan, detalla que las consultas para incluir mayor tecnología de este tipo crecieron hasta 300 por ciento y precisó que las soluciones para VDI comercializadas en la actualidad por su firma son tres: Fussion Access-huawei, plataforma de la cual la infraestructura base se hace un deploy exclusivo para el cliente, y tiene dos modalidades: una que oficia de Gateway y se hace el deploy de máquinas independientes. Por otro lado, la modalidad de plataforma que incluye los recursos para el deploy incluido de las máquinas. “Una de los features más interesantes de esta plataforma es la virtualización de aplicaciones directa”, resalta Mazzeo. La segunda solución es Windows Virtual Desktop (Microsoft-azure), utilizada cuando un cliente pretende relacionar más de un usuario a cada máquina virtual o su infraestructura está íntegramente basada en Microsoft. “Cumple las mismas condiciones que Fussion Access en cuanto a features, pero con mínimas diferencias”, explica. La tercera solución que ofrece el operador telco en este pandemia es Acceda. Se trata de un gateway de conexión donde la plataforma administra los accesos y la conexión es directa a la infraestructura, que puede estar en la nube de cualquier vendor, o en virtualizaciones locales /on-premise. “Es una plataforma Entry Level orientada al mercado SMB y los costos son significativamente más bajos”, completa. Por último, Iván Souza, Country Manager de Tivit Argentina, la oficina local de la empresa brasileña especializada en transformación digital, resaltó que creció hasta un 40 por ciento la contratación de este tipo servicios de tecnología remota a partir del arranque de la cuarentena. La empresa de soluciones tecnológicas tiene presencia en siete países de América latina y pronotica que el 40 por ciento de las empresas que tomó la decisión de digitalizar sus operaciones adoptará el teletrabajo como nueva modalidad de trabajo, una vez que culmine la cuarentena. Estimó que “las firmas argentinas son más tradicionalistas” respecto de sus pares de Chile y Brasil, en buena medida por la inestabilidad económica del país. “Cuesta romper más algunos paradigmas. Le falta al mercado argentino un quiebre por parte de los CEO y CIOS. Aún piensan que salir de sus aplicaciones y migrar hacia el Cloud, puede hacerles perder el control de su operación”, completa.
— Iván Sourza,