En el mundo todavía no lo pueden creer
“Guerra química” y “súper bochorno”, algunos de los títulos de los medios destacados; hasta The New York Times le dedicó un espacio
La prensa mundial se hizo eco del escandaloso superclásico por los octavos de final de la Copa Libertadores con grandes titulares que hablaron de “vergüenza”, “bochorno” y “miseria”.
“Boca-River, del fútbol a la guerra química”, tituló el diario El País, de España, sobre el acontecimiento, que fue suspendido anteanoche tras una agresión con una sustancia química a los jugadores de River. Horas más tarde, en la Web también hubo un espacio mayúsculo. “Argentina se escandaliza ante el “superbochorno” del BocaRiver”, rubricaron. Y expresaron en la bajada: “Dirigentes políticos hablan de “suspender el fútbol” en un clima de enorme pesimismo en todo el país”.
“Bochorno en la Bombonera”, coincidió el diario El Mundo, mientras que el periódico deportivo Marca habló también de una “guerra química” en su web y calificó al duelo como el “Superclásico de la vergüenza”. Con el transcurrir de las horas, hubo una columna de once temas relacionados, con el foco en “La FIFA pide ‘mano dura’ tras el bochorno del superclásico”, que además incluyó una fotogalería, como ocurrió en otros portales europeos, como en Italia y Francia.
“Vergüenza e indignación. Una verdadera miseria”, fueron las palabras con las que el diario deportivo italiano La Gazzetta dello Sport comenzó su crónica, acompañada por imágenes de los jugadores de River afectados por el gas que vándalos de Boca les lanzaron en el túnel que conducía al campo antes del segundo tiempo.
“Ataque con gas pimienta en Argentina”, tituló la web del dia- rio alemán Bild, el más leído de Europa. “El fútbol sudamericano vuelve a verse sacudido por un incidente violento”, se pudo leer en el portal.
El diario The New York Times, que en forma habitual no destina el espacio a los asuntos del fútbol, fue enérgico. Destacó que “el partido más esperado del fútbol argentino debió ser suspendido por un ataque con gas pimienta a los jugadores de River”, mientras que el británico The Guardian señaló que los futbolistas del conjunto “millonario” debieron ser “llevados al hospital” tras el encuentro. “Infierno clásico”, fue el título de otro medio inglés, The Sun.
O Globo, de Brasil, también decidió una amplia cobertura, con el interés último en la posible sanción a Boca y a la Bombonera. O Tempo, de Belo Horizonte, la ciudad de Cruzeiro, el próximo adversario de River o Boca, advirtió: “Sin el partido de Cruzeiro, la Conmebol anunció los cruces de los cuartos... por el partido interrumpido por la violencia en la Bombonera”. Y en América del Sur, todos los medios le brindaron una extensa repercusión. La situación cruzó el charco. La policía uruguaya exhortó a que el superclásico del domingo entre Peñarol y Nacional sea “una fiesta” y se evite reproducir los incidentes violentos en Buenos Aires.
Las máximas autoridades de la policía local emitieron un alerta. “Tras los tristes episodios acaecidos en la vecina orilla marcaron un llamado de atención que las autoridades uruguayas prefieren advertir antes que lamentar”, advirtió un comunicado del ministerio del Interior. En una rueda de prensa se ofrecieron los detalles del operativo de seguridad. “No permaneceremos como testigos de eventuales hechos de violencia sino que vamos a ir preparados para actuar”, advirtió el jefe policial de Montevideo, Sergio Guarteche.
Y la casa del fútbol mundial fue elocuente. “La FIFA condena de la forma más enérgica toda manifestación de violencia asociada al fútbol, simplemente porque la violencia no debe tener lugar en el deporte”, dijo un portavoz a DPA. “Es importante que las asociaciones nacionales de la FIFA tomen las medidas pertinentes para evitar hechos de violencia”, insistió.