España, en crisis por Nadal y la Ensaladera
Rafa no sale de su mal momento; echaron a la capitana Gala León
LONDRES (De un enviado especial).– Modelo de éxito y también de funcionamiento, el tenis español viene golpeado en los últimos tiempos. La eliminación de Rafael Nadal en la segunda rueda a manos del alemán Dustin Brown seguía sin digerirse el día después. La pregunta circuló en Wimbledon entre periodistas, entrenadores, dirigentes y jugadores, pero nadie encontro la respuesta al muy obvio interrogante: ¿Qué le pasa a Nadal?
“Ganó dos veces aquí y jugó cinco finales en total. Eso no está nada mal…”, recordó el serbio Novak Djokovic, que cree que los éxitos del pasado le añaden una presión extra al nueve veces campeón de Roland Garros.
John McEnroe fue menos sutil: “El plan de juego que tuvo ante Brown fue horroroso. Está buscando pegarle demasiado fuerte a la pelota, exagera, hay una desconexión en su mente. Para mí, el Nadal de hoy está fuera de los 30 primeros del ranking”. Y fue aún más lejos: “Aunque le pese al tío Toni, tiene que conseguir un entrenador nuevo”.
Nadal está ya descansando unos días en Mallorca para disfrutar del verano –la única ventaja quizá deirse antes de tiempo del All England– y preparar luego el regreso al circuito norteamericano sobre cemento. Pero el descanso es relativo, porque el llamativo sainete español en torno a la Copa Davis continúa: el gobierno forzó esta semana la salida de dos presidentes de la federación, y apenas asumió el nuevo, su primera decisión fue echar a Gala León, la mujer capitana de la Davis que se encontró con la oposición cerrada de todos los jugadores desde que fuera designada en octubre del año pasado.
Tras meses en los que el debate giró en derredor a si era machismo o no cuestionarla, la ex jugadora cayó. No irá a la serie ante Rusia en Vladivostok, a tiro de piedra de la frontera con Corea del Norte. El nuevo capitán es Julián Alonso, ex número 30 del mundo, ex novio de Martina Hingis y no especialmente querido por los jugadores. ¿Continuará?