El dólar implícito evitó una cruda caída
La fortaleza que volvieron a exhibir los precios del tipo de cambio que surgen de liquidar en divisas en el exterior papeles comprados en la plaza local (y en pesos) le permitió ayer a la Bolsa porteña superar sin mayores costos una rueda de negocios compleja, en la que su índice de precios se mostró siempre presionado a la baja por el fuerte derrumbe (de 7% promedio) que sufrió el crudo.
Sin embargo, y pese a que mantiene 43% de su comportamiento ligado a los papeles petroleros, el Merval cerró la jornada con un avance de 0,2% aunque, dada la notable prudencia inversora, los montos negociados siguen achicándose. Su macro resultado contrasta con el avance de 1,5% que registró el Merval Argentina, un índice que al excluir a Petrobras (-3%) y Tenaris (-0,9%) -dado que se compone sólo de empresas locales- pudo nutrirse de las alzas de Aluar (+3%), el Grupo Galicia (+2.8%), Siderar (+2,3%) y Pampa (+2,3%), entre otras.
El derrape del crudo fue consecuencia del temor al retorno de un mercado sobreabastecido. Esto, ante la posibilidad de que Irán recupere pronto su cuota del mercado, de completarse con éxito las conversaciones que mantiene sobre su programa nuclear, dado que eso implicaría el fin de las sanciones económicas que le aplicaron.
La fortaleza que volvió a exhibir el “contado con liqui” (cerró a $ 13,21 con un alza de 0,53%) impulsó nuevas mejoras de 1% promedio entre los bonos de la deuda en dólares, algo que se descontaba dada la cantidad de transacciones “demoradas” con que se maneja el mercado, ante un pedido oficial para que se dosifiquen las operaciones, para evitar que el precio del dólar que surge de ellas se empine y termine contagiando al blue.