El chavismo ataca a Almagro tras el ultimátum de la OEA
La canciller Rodríguez dijo que es un “enemigo del país”
CARACAS.– Horas después del ultimátum del secretario general de la Organización de los Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, a Venezuela exigiéndole el llamado a elecciones, el chavismo respondió con su habitual defensa: “Malhechor, enano de la moral, enemigo del país… Su odio a Venezuela se lo va a tener que tragar”, lanzó la canciller Delcy Rodríguez.
En un comunicado previo, el gobierno expresó su más “profundo repudio” ante un informe “ilícito e ilegítimo”, que pretende “promover la intervención internacional de nuestro país y acentuar la guerra económica”.
“Pocas sanciones morales y políticas existen más fuertes para los gobernantes de un país que la mirada y las medidas que puedan tomar sus pares”, fue la advertencia de Almagro a última hora de anteayer .
“Si no se realizan elecciones generales bajo las condiciones estipuladas pasaría a ser el momento necesario para aplicar la suspensión a Venezuela de las actividades de la organización’’, señaló Almagro.
El ex canciller uruguayo, actual bestia negra del chavismo, también exigió la apertura inmediata de un canal humanitario y el retorno del orden constitucional con el restablecimiento del poder del Parlamento, la conformación de un nuevo Consejo Nacional Electoral (CNE) y la renovación del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), convertido en el martillo revolucionario contra la Asamblea Nacional y contra la oposición.
Para Almagro, es básico que el chavismo aplique un sistema de lucha contra la corrupción con asistencia internacional (el ex ministro Héctor Navarro, clave en los gobiernos de Hugo Chávez, eleva a 500.000 millones los dólares “fugados” del país en 18 años) y que el gobierno libere a los “116 presos políticos”, uno menos hoy tras la liberación del concejal de Voluntad Popular Roniel Farías. “Hay ruptura total del orden democrático”, concluyó Almagro.
El secretario general de la OEA necesita el voto de 18 países para primero promover la Carta Democrática, una cifra que puede alcanzar si todos los países críticos votan en bloque. Inalcanzable se antoja por ahora conseguir la expulsión de Venezuela, para la que hacen falta 24 votos, casi imposibles por el control económico que el chavismo mantiene todavía, pese a la crisis, sobre los países pequeños del Caribe.
“Está jugando agresivamente para presionar a los países a que hagan algo, pero reconoce que es un juego de largo aliento. En el corto plazo creo que la opinión mayoritaria es seguir dándole una oportunidad al diálogo”, vaticinó a el analista Mariano la nacion de Alba.
La oposición recibió con alivio la iniciativa de Almagro, en uno de sus peores momentos desde su abrumadora victoria electoral en las elecciones de 2015.