Detuvieron a un policía en Flores, acusado del homicidio de un vendedor de pasta base
Cuando le secuestraron el arma, a 20 cuadras del crimen, le faltaba un proyectil
Un efectivo de la Policía de la Ciudad fue detenido debido a que existirían sospechas de que habría matado en Flores a un vendedor de pasta base de cocaína que presuntamente se habría negado a pagar una coima para comercializar la droga.
Según fuentes policiales y judiciales, el violento episodio ocurrió anteanoche, minutos después de las 22, en el pasaje Timbó, a pocos metros del cruce con Carabobo. En ese momento, los vecinos oyeron una discusión y luego, escucharon el estruendo de un disparo.
Ese balazo provocó la muerte de un joven, de 25 años, que habría sido identificado como Emanuel González, señalado como vendedor de drogas y que vivía en una casa tomada, cerca de la escena de la discusión y posterior asesinato.
A un costado del cuerpo de la víctima, los efectivos que llegaron al lugar alertados por el llamado de un vecino al número de emergencias 911, hallaron una pipa similar a las utilizadas para fumar pasta base de cocaína. Testimonios clave
Cuando los uniformados comenzaron a interrogar a los testigos y lograron establecer las circunstancias que rodearon al homicidio, obtuvieron un dato clave. Los vecinos coincidieron en haber visto un automóvil Peugeot 307 negro con tres ocupantes. Ese vehículo presentaba una particularidad, no le funcionaba el faro delantero izquierdo.
Con estos datos, los efectivos del móvil policial alertaron al resto de las patrullas para que iniciaran la búsqueda del automóvil que habría sido utilizado por los asesinos. Al aportar la descripción del vehículo, indicaron que se habría dirigido hacia la zona cercana a la villa 1-11-14.
A casi veinte cuadras de la escena del homicidio, en el cruce de Bonorino y Castañares, un grupo de efectivos de la Gendarmería que había recibido el alerta, interceptó al Peugeot 307 negro con uno de los faros delanteros dañados.
En ese momento, los efectivos de la Gendarmería solicitaron a los ocupantes del vehículo que se identifiquen. Al revisar los documentos y las credenciales, advirtieron que al menos uno de ellos se desempeñaba en la Brigada de Rápida Intervención de la Policía de Ciudad. Esa unidad fue creada recientemente para operar en zonas de alto nivel de conflictividad como Retiro, Constitución y Once.
Debido a una serie de contradicciones en las que incurrieron el policía y sus acompañantes, los efectivos de la Gendarmería convocaron a testigos y secuestraron el arma del efectivo policial.
Al retirar el cargador, advirtieron que faltaba un proyectil. Ante la presunción de que el policía hubiera sido el autor del disparo, comunicaron el hecho al juzgado de turno que ordenó detener al sospechoso.
A través de un comunicado, el Ministerio de Seguridad porteño remarcó que el policía fue pasado a disponibilidad debido a la decisión de tener tolerancia cero ante los casos de corrupción policial o vínculos de uniformados con delitos.
Además se inició un sumario administrativo interno que quedó a cargo de la Oficina de Transparencia y Control Externo de la mencionada fuerza de seguridad.