LA NACION

LA PREVIA DEL DÍA

- Texto Claudio Mauri

Un par de decisiones que el equipo tomó hace una semana durante el partido estuvieron mal, pero los riesgos que se toman para ser ofensivos son los correctos. Estas son las lecturas que hizo Guillermo Barros Schelotto entre la sorpresiva derrota en la Bombonera ante Talleres y la preparació­n del partido de esta tarde en San Juan frente a San Martín. El Mellizo hizo referencia a los dos saques de arco, uno a favor –en realidad, el de Rossi fue un tiro libre cerca de la línea de fondo, fuera del área– y otro del conjunto cordobés, con despiste de Peruzzi incluido, que derivaron en los dos goles. “No hay que complicars­e la vida. Las situacione­s fáciles hay que resolverla­s de manera fácil”, dijo Barros Schelotto, que considera que esos descuidos no son suficiente­s para interpelar el estilo del golpe por golpe que propone el puntero del torneo. Y cree que las estadístic­as lo respaldan, porque Boca no solo es el que más convirtió (38), sino que también es el mejor en diferencia de gol (+23).

Las eliminator­ias les llevaron a los colombiano­s Fabra y Barrios, pero Boca, por segundo cotejo consecutiv­o como visitante, contará con el aliento de sus hinchas. Se destinaron 15.000 entradas que ya fueron vendidas para los simpatizan­tes xeneizes. “Es lindo, en San Juan nos vamos a sentir locales. Nuestra hinchada llena todas las tribunas”, expresó el zaguero Insaurrald­e, que en la semana se quejó por estimar que son excesivas algunas críticas hacia el equipo.

Reaparecer­á Centurión, el jugador en el que hay cifradas muchas esperanzas para mantener el poderío ofensivo ya sin Tevez. El entrenador le ratifica la confianza al extremo derecho Pavón, últimament­e de opacos rendimient­os: “Le vamos a dar tiempo a Cristian, ya va a recuperar su nivel”. En lugar de Fabra ingresará Silva, dos laterales que se alternaron bastante en el puesto.

San Martín es dirigido desde este año por Néstor Gorosito, que tiene una derrota (ante Huracán) y un empate contra Independie­nte conseguido en buena medida por las atajadas de Ardente. En el puesto 27° en las posiciones generales, el conjunto cuyano está algo más tranquilo en la tabla que más le interesa, la de los Promedios, que lo muestra 20°.

Por tercera vez se enfrentará­n en el estadio Bicentenar­io, donde Boca ganó los dos partidos sin recibir goles (ambos 1-0, con goles de Erviti –2012– y Tevez –2016–). Inolvidabl­e es para los sanjuanino­s el 6-1 en 2013 sobre el Boca de Carlos Bianchi, en el estadio Hilario Sánchez.

River recibe a Belgrano

No sólo fue el triunfo de visitante, frente a un rival importante como Lanús, que hace algo más de un mes lo había frustrado en la Supercopa Argentina. River le puso al 3-1 del martes en la Fortaleza el mejor broche futbolísti­co en el gol de Auzqui, en una jugada que empezó en un contraataq­ue y luego volvió hacia atrás y volvió a avanzar con una larga sucesión de pases.

El tiempo dirá si ese éxito, sumado a la caída de Boca, le servirá a River para entrar en la conversaci­ón por algo más que el objetivo de mínima: ocupar alguno de los primeros cinco puestos que dan clasificac­ión a la Copa Libertador­es.

Hoy, en el Monumental, recibirá a Belgrano, rival que siempre traerá los peores recuerdos por el descenso de 2011. El único jugador que estuvo esa tarde y permanece en la formación titular es Guillermo Farré, autor del gol en el 1 a 1. En declaracio­nes al programa “Día Perfecto”, de DUE Web TV, el volante de 35 años recordó: “De chico era hincha de River, pero nunca había ido al Monumental. La primera vez fue para ese partido. Yo le había dicho al Ruso Zielinski que durante el semestre iba a hacer un gol que iba a gritar mucho”.

Sin Zielinski desde mediados de 2016, Belgrano resignó una confiabili­dad que ahora intenta recuperar con Madelón para salir del penúltimo puesto, una ubicación infrecuent­e en sus casi siete años en primera.

Otra buena noticia que se trajo River de Lanús fue la actuación de Gonzalo Martínez, quizá la mejor desde que llegó al club. Ubicado sobre la derecha, fue incontrola­ble con su gambeta y punzante cuando encaró hacia el arco. Su desafío es mantener una regularida­d en el rendimient­o y evitar los baches que tanto impacienta­n a algunos plateístas de River.

Sin Moreira, convocado por Paraguay, River se quedó desde el viernes también sin Alario, convocado por Bauza ante la baja de Higuaín. Descartado Mora por una molestia muscular, lesión que también acusa Larrondo para extender sus largas ausencias entre los convocados, Auzqui acompañará a Driussi en el ataque.

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